Luis Riveros



Luis Riveros

Nuestro país está sufriendo una delicada situación en materia económica. La consideración de esta realidad debe ir más allá de las miradas partidistas, de los anclajes políticos y de las interpretaciones intencionadas. Se trata de un serio problema nacional en vistas a nuestra estabilidad y perspectivas de recuperar un liderazgo regional que hemos perdido en materia económica y financiera.

La ciudadanía está abandonando a la educación pública. En todos los quintiles de la distribución del ingreso, la mayoría de los escolares figura asistiendo a colegios privados.

La Academia Chilena de Ciencias Sociales, Políticas y Morales, del Instituto de Chile, publicó, con el apoyo de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, un libro conteniendo el aporte de 17 de sus académicos miembros. La obra concierne a los 50 años del 11 de septiembre de 1973, tema que ha preocupado a muchas instituciones y personas durante meses recientes.

El país ha revivido las profundas divisiones que llevaron al cruento desenlace de hace 50 años. Tales divisiones no sólo se han conmemorado en un sentido histórico y constructivo, sino que han reedificado y en gran medida profundizado las mismas confrontaciones.

La “electrización” que está viviendo el país, en la expresión utilizada por el presidente de la República, tiene su origen en señales y actitudes de quienes están a cargo de administrar el sistema político. La “electrización”, mejor entendida como el ambiente de alta crispación y confrontación que vivimos a diario, no se ha producido espontáneamente.

El país vive una seria encrucijada económica y social. En su análisis no es suficiente ni satisfactorio entrar a distribuir culpas, puesto que lo que se precisa es enfocar el crucial tema de cómo enfrentar lo que viene. Nuestros políticos parecen no avizorar las nefastas consecuencias que se podrían derivar de las actuales tendencias, y que se mezclarán confusamente con los vigentes problemas sociales y políticos.

El gobierno ha convocado a un grupo de trabajo para abordar el importante tema de investigación y desarrollo, implicando temas en ciencia, tecnología e innovación. Esta Comisión, que articula a varias agencias y organismos del propio gobierno, ha emitido un primer informe retratando las principales preocupaciones abordadas y vertidas en conclusiones y líneas orientadoras del trabajo futuro en estas cruciales áreas.

El país observa, con enorme desconcierto, los actuales acontecimientos marcados por acusaciones sobre mal uso de los recursos públicos. Es cierto, no es primera vez que este tipo de cosas ocurre en nuestro país, siempre causando desorientación e incredulidad en la ciudadanía.

Levanta preocupación la información que emana de diversas encuestas respecto del vigente proceso constitucional. En efecto, una alta proporción de personas manifiesta no estar interesada en el proceso mismo, mientras que más de la mitad de los encuestados revela que está dispuesta a rechazar el texto que se proponga.

Mucho se ha escrito sobre las graves deficiencias asociadas a una educación de mala calidad como la que, en general, se imparte en Chile. Se ha repetido suficientemente que Chile necesita redefinir los contenidos y enfoques de la educación entregada en los distintos niveles, y que esto debe conllevar un reenfoque en materia de formación pedagógica.