Germán Pinto



Germán Pinto

El 8 de agosto recién pasado ingresó al Congreso el proyecto de ley que “propone un régimen tributario especial para los comerciantes de ferias libres”, siendo una especie de “monotributo” que ayudará el cumplimiento tributario de un importante sector de nuestra economía, no por el aporte que éste hace al PIB, sino por su relación tradicional que existe con la población.

La semana pasada fuimos testigos de una situación muy complicada por su causa y por las consecuencias que generó.

La semana pasada se dio inicio a la formación de la Red de Fundaciones Donantes (RFD), una entidad privada que pretende fortalecer el ecosistema de donaciones para facilitar el cofinanciamiento de proyectos de beneficencia.


El Director Nacional de Servicio de Impuestos Internos subrogante, don Javier Etcheverry, visitó a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputadas y Diputados la semana pasada, para presentar sus proyectos de fiscalización y su diagnóstico al organismo que está recién comandando y espera continuar a su cabeza si gana el concurso de Alta Dirección Pública abierto en estos días.

Preocupación y, por qué no decirlo, desilusión me causa el trabajo que realizó la Comisión de Hacienda del Senado respecto al proyecto de ley de cumplimiento tributario que esta semana será tratado en la sala. 

Muy aplaudido fue en anuncio del presidente de Brasil en la 112° Conferencia de la OIT realizada el mes pasado, respecto a impulsar la creación de un tributo para los superricos, dando como ejemplo la ley que él promulgó en su país en diciembre del año pasado que afecta a personas de altos patrimonios y empresas offshore. Esta iniciativa legal espera recaudar 6 mil millones de dólares hasta el 2025. 

Con mucho asombro recibí la noticia de que el señor Javier Etcheberry asumiría la dirección del Servicio de Impuestos Internos, porque era ver a un “clásico” que volvía a estar vigente en la contingencia tributaria.

Ha estado dinámica la agenda legislativa-económica del Gobierno en las últimas semanas, estando ya publicada la ley que crea un impuesto sustitutivo a los impuestos finales, hay avances en la ley de cumplimiento tributario y se ha anunciado que antes de septiembre se ingresará al Congreso una nueva reforma tributaria del Impuesto a la Renta.

El proyecto de ley que se está discutiendo en el Senado sobre el cumplimiento tributario recoge una idea que siempre ha estado en las iniciativas de reformas tributarias, pero que no han prosperado respecto a modificar el artículo 64 del Código Tributario, que otorga al Servicio de Impuestos Internos (SII) la facultad de tasar las bases de aquellas operaciones que realicen los contribuyentes y cuyos valores resulten notoriamente distintos a los corrientes en plaza u operaciones similares, cuando no cuente con los antecedentes para determinar las cuantías de impuestos calculados por los contribuyentes y otra situaciones particulares.

El martes 18 de junio recién pasado fue la audiencia que dio la Comisión de Hacienda del Senado, por la discusión del proyecto de Cumplimiento Tributario que está siendo debatido en el Congreso. En esa oportunidad, se desarrolló un interesante intercambio de ideas entre el senador Felipe Kast y el coordinador de política tributaria del Ministerio, don Diego Riquelme, sobre la existencia de una legítima razón de negocios (LRN) y de la legítima opción de adoptar una figura legal que permite una menor carga tributaria.