Banco Central y ajuste de sesgo de política monetaria: riesgos inflacionarios en la mira

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Banco Central POLI

De acuerdo a la minuta de la sesión de política monetaria N° 310, celebrada el 17 de diciembre de 2024, por el Banco Central, todos los consejeros del organismo coincidieron en que la evaluación del escenario central del IPoM de diciembre indicaba que la tasa de interés de política monetaria (TPM) debía tener una trayectoria decreciente durante el horizonte de proyección. Hubo acuerdo en que esa trayectoria debía considerar la existencia de riesgos significativos, particularmente por el panorama de inflación de corto plazo. Este mostraba una variación anual del IPC que aumentaría hasta valores del orden de 5% durante el primer semestre de 2025, con un balance de riesgos de corto plazo sesgado al alza.



En la sesión, a la que asistieron la presidenta del ente emisor, Rosanna Costa Costa; la vicepresidenta, Stepanka Novy Kafka; y los consejeros Alberto Naudon Dell’Oro, Luis Felipe Céspedes Cifuentes y Claudio Soto Gamboa, hubo acuerdo que se debía ser cauteloso e ir acumulando información Reunión a Reunión, evaluando sus implicancias para la convergencia inflacionaria y así determinar la oportunidad en que se concretarían las rebajas de la TPM. Se añadió que, de aquí al próximo IPoM, existiría un conjunto de antecedentes que permitiría evaluar de mejor manera si algunos de los riesgos señalados se habían materializado y, en caso de que ello ocurriese, ajustar la estrategia monetaria conforme a lo que fuese necesario. Bajo ese escenario, todos los consejeros consideraron que las opciones plausibles para esta Reunión eran: reducir la TPM en 25 puntos base (pb); y mantener la TPM en 5,25%.


Respecto de la opción de reducir la TPM en 25pb, se indicó que esta era coherente tanto con el proceso de reducción del nivel de restricción de la política monetaria iniciado a mediados de 2023 como con la convergencia de la inflación a la meta de 3% en el horizonte de política de dos años. Todos los consejeros coincidieron en que para que esta opción fuera congruente con los riesgos identificados, era preciso comunicar que se abría el espacio para futuras pausas. Un Consejero indicó que, con una decisión como esta, la TPM se acercaba más al rango considerado como neutral, lo que hacía natural que los movimientos de aquí en adelante fueran graduales y pausados.


En cuanto a la opción de mantener la TPM, algunos consejeros mencionaron que, a su juicio, esta alternativa ponderaba más los riesgos presentes y reflejaba de mejor manera la incomodidad que representaba una inflación de 5%, con riesgos de corto plazo sesgados al alza.


En definitiva, por votación unánime, se redujo la TPM en 25pb. hasta 5%.

europapress