Informe Macroeconómico Coyuntural de junio 2025

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Victor Salas

El crecimiento del producto en Chile muestra una tendencia altamente fluctuante alrededor del 2%, pero en el 2º trimestre se está instalando en un nivel levemente más alto, 2,7%.


La inflación anual sigue, en junio 2025, muy por encima de la meta del 3% establecida por el Banco Central (exactamente en 4,1%). El Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio reafirmó que la trayectoria de la inflación ha seguido la senda esperada, aunque persisten riesgos relevantes que podrían retrasar su convergencia. Entre ellos destacan la incertidumbre geopolítica internacional, especialmente el conflicto Irán–Israel, la desaceleración económica de China y la renovada tensión comercial global por parte de Estados Unidos, también los efectos internos de los aumentos de tarifas eléctricas. Aunque, la inflación total ha venido descendiendo, la inflación subyacente (sin volátiles) recién ha comenzado a situarse por debajo del 4%, lo que constituye una señal positiva. No obstante, las expectativas inflacionarias para el próximo año siguen elevadas: el sector empresarial proyecta un 4,3% para 2026, lo que refleja un ajuste de precios más persistente. La inflación interanual se espera que se mantenga entre 4,3% y 4,5% en los próximos meses, en un escenario de menor presión por parte de los precios energéticos y con señales de moderación en bienes transables y servicios. Sin embargo, los índices de confianza de consumidores (42,7) y empresas (44) siguen en niveles pesimistas, lo que podría contribuir a una dinámica inflacionaria más inercial y justificar una postura monetaria cautelosa.


A su vez, las tasas de desempleo de este año siguen mostrando la alta fragilidad del mercado laboral, permaneciendo desde 8,4% en el trimestre móvil de diciembre-enero-febrero, hasta 8,9% en marzo-abril-mayo. El mercado laboral masculino registró una tasa de desocupación de 8,1% en mayo de 2025, lo que equivale a un aumento interanual de 0,5 puntos porcentuales. Este incremento se explica por un leve crecimiento en la fuerza de trabajo, de 0,4%, junto con una caída marginal en la ocupación, de 0,1%. En el mismo trimestre, la tasa de participación masculina descendió a 71,7%, mientras que la tasa de ocupación se redujo a 65,9%. En el caso de las mujeres, la desocupación se ubicó en 10,1%, superando nuevamente el umbral de dos dígitos. Este resultado refleja un aumento en la participación laboral femenina del 1,4%, acompañado de una expansión menos significativa del empleo, que creció solo un 0,5%. Aun así, se observaron ligeras mejoras en los indicadores de inserción: la tasa de participación alcanzó el 53,0% y la tasa de ocupación llegó al 47,7%. En términos dinámicos, durante mayo se estima una destrucción neta de aproximadamente 13.100 empleos, lo que confirma una desaceleración del mercado laboral tras el repunte observado a comienzos de año.


El costo laboral por hora creció un 9,5% en doce meses, reflejando las presiones que enfrentan las empresas en un contexto de inflación aún elevada. Esta tendencia puede influir en las decisiones de contratación y reajustes salariales durante el segundo semestre, especialmente si se agudizan los riesgos internacionales o persiste el bajo dinamismo económico. Si bien el empleo total no ha mostrado retrocesos abruptos, el alza de los costos laborales en un escenario de baja productividad podría limitar el margen de acción de las empresas. El Banco Central ha advertido que el crecimiento de las remuneraciones reales debe ir acompañado de mejoras en eficiencia, para evitar efectos de segunda vuelta sobre la inflación y preservar la estabilidad macroeconómica.


Los precios de las materias primas (cobre, petróleo) fluctúan según la situación internacional. El precio promedio del cobre alcanzó en junio los 4,46 dólares por libra, registrando un alza mensual de 3,19% en un contexto de alta volatilidad financiera global. Esta dinámica estuvo influida por factores monetarios, tensiones geopolíticas y señales mixtas desde las principales economías consumidoras de metales, básicamente por los avisos y/o aplicaciones de aranceles. Los precios internacionales del petróleo mostraron una marcada volatilidad, con alzas concentradas en la primera mitad del mes de junio. El crudo WTI, de referencia para Chile, promedió 67,49 dólares por barril, mientras que el Brent se situó en 71,45 dólares por barril, movimientos que estuvieron fuertemente influenciados por el estallido del conflicto entre Irán e Israel, que elevó los temores de una interrupción en el suministro global de crudo.


El Banco Central de Chile sigue manteniendo en 5%, desde diciembre 2024 la Tasa de Política Monetaria (TPM). Durante junio de 2025, el Consejo del Banco Central de Chile decidió mantener la Tasa de Política Monetaria (TPM) en los mismos niveles, sin cambios desde diciembre de 2024, reafirmando su compromiso con la convergencia de la inflación hacia la meta del 3% en un horizonte de mediano plazo. Esta decisión se enmarca en un entorno externo volátil, caracterizado por tensiones geopolíticas en Medio Oriente, ajustes en las expectativas de tasas de política económica en economías avanzadas y señales mixtas desde China y Europa.


En junio, el tipo de cambio del dólar en Chile se mantuvo relativamente estable, con cotizaciones que oscilaron entre los $930,25 y $950,16. Esta evolución se dio en un contexto internacional marcado por alta volatilidad, impulsada por las tensiones geopolíticas en Medio Oriente, el tono restrictivo sostenido por la Reserva Federal de Estados Unidos y señales mixtas sobre la trayectoria económica global.


El país está en una nueva situación de estancamiento productivo, alrededor de 2.5%, mientras se observa una inflación que no cede y se mantiene sobre 4% anualizada, lo que hace que cautelosamente el Central mantenga su TPM en 5%, mientras que la política fiscal presenta una estrechez que limita cualquier impulso al crecimiento. Además, existen serias expectativas (por la guerra arancelaria en curso) de caída estimada por la FED para el PIB de USA (de 2,8% en 2024 a 1,4% en 2025), lo que afectará la economía mundial y a la nuestra.


Víctor Salas Opazo y Equipo (1) 

Conversatorio de Política Económica, ECPE 

Departamento de Economía, USACH

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