Expansión de 1,3%:

​ASIMET: Sector metalúrgico metalmecánico cierra primer trimestre con leve alza, pero proyecciones para 2025 siguen en terreno negativo

|

Industria M.M (1)

Una expansión de 9,6% registró el sector metalúrgico-metalmecánico en marzo de 2025, lo que permitió revertir parcialmente el débil comienzo de año y cerrar el primer trimestre con una variación positiva del 1,3%, respecto del mismo período de 2024. Este desempeño fue impulsado principalmente por la Fabricación de maquinaria de uso general, que creció un 29,3% y aportó 4,1 puntos porcentuales al total sectorial.


Según explicó el presidente de ASIMET, Fernando García, la recuperación exhibida en marzo fue un hecho puntual, que se debió a una menor base de comparación en ese mismo mes de 2024, porque el escenario para el resto del año se mantiene complejo. Agregó que se proyecta que el sector experimente una contracción anual de entre -3% y -5%, debido, principalmente, al cese de producción en septiembre pasado de la Compañía Siderúrgica Huachipato, cuyo impacto comenzará a reflejarse con mayor intensidad en los próximos trimestres, debilitando la tendencia del crecimiento acumulado.


"Este leve crecimiento no debe confundirse con una recuperación sostenida. El desempeño del sector continúa presionado por factores estructurales como la pérdida de capacidad instalada, la menor competitividad frente a productores externos y la escasa articulación de políticas públicas que prioricen la manufactura nacional. Frente a este escenario, como gremio hacemos un llamado a una revisión urgente de las estrategias de desarrollo productivo y de comercio exterior, especialmente en un año donde se definen los programas presidenciales. Necesitamos que quienes aspiran a gobernar Chile entiendan que sin una industria fuerte no habrá desarrollo sostenible ni empleo de calidad”, sostuvo.


Al desagregar el comportamiento por subsectores, el dirigente gremial informó que solo tres de los nueve segmentos de la industria cerraron el trimestre en terreno positivo. En el extremo opuesto, Industria básica de hierro y acero sufrió una caída de 34,8%, restando 3,2 puntos porcentuales al total. Este retroceso, explicó García, está fuertemente asociado al aumento de las importaciones del mismo rubro, que crecieron 74,2%, evidenciando un fenómeno de sustitución de la producción nacional.


“Estamos frente a una guerra comercial global en la que varios países están aplicando barreras para proteger a sus industrias, lo que podría agravar aún más este fenómeno de sustitución de producción nacional. En ese escenario, los excedentes de producción buscarán ingresar a mercados más abiertos. Como somos una economía con un altísimo nivel de apertura estamos particularmente expuestos a una avalancha de importaciones. Por lo tanto, es urgente que el Estado asuma un rol activo en la defensa de nuestra industria nacional”, sostuvo el dirigente gremial


Una desindustrialización silenciosa

Al entregar cifras de comercio exterior, el presidente de ASIMET informó que durante el primer trimestre Perú se posicionó como el principal destino de exportaciones del sector, concentrando 16,4% del total, equivalente a US$ FOB 103 millones. Estados Unidos y Argentina completan el podio, y en conjunto representan un 37,5% de las ventas externas del rubro. En total, las exportaciones alcanzaron US$ FOB 628,7 millones, marcando un incremento interanual de 21,9%.


Las importaciones durante el periodo, en tanto, ascendieron a US$ CIF 5.831,6 millones, un aumento de 18,2% en comparación con enero-marzo de 2024. China se mantuvo como principal origen de las compras, con un 34,4% del total importado (US$ CIF 2.006,3 millones).


Finalmente, Fernando García señaló que más allá de analizar cifras puntuales hay que mirar la tendencia estructural, “y hoy esa tendencia muestra una desindustrialización silenciosa, causada por la falta de políticas que protejan y promuevan la producción local. La ausencia de una política de desarrollo productivo activa y herramientas de defensa comercial efectivas están dejando a la industria nacional en una situación de alta vulnerabilidad. No se trata de cerrar la economía, sino de generar condiciones mínimas de equidad competitiva, algo que todos los países desarrollados ya hacen. Los candidatos presidenciales deben asumir esta realidad y comprometerse con medidas concretas para recuperar el tejido productivo nacional”, concluyó.


europapress