La tragedia del incendio en Viña del Mar con sus consecuencias devastadoras en términos de pérdidas humanas y daños materiales generó un clima de desconfianza y pesimismo en las familias viñamarinas. El impacto emocional y psicológico de este tipo de sucesos repercutió en la percepción general de seguridad, estabilidad y confianza en las instituciones y por consiguiente en el consumo de bienes y servicios, contribuyendo a un ambiente de mayor cautela y preocupación en términos económicos y sociales.
Si bien es cierto, tuvimos una buena temporada de verano y mejores fines de semana en términos de visitantes, y con un aumento lento pero llamativo en extranjeros, ya retomando las cifras prepandemia, es también una realidad que las familias están cautelosas de consumir y sus patrones de consumo han ido siendo cada vez más austeros, dada la condición económica del país.
Estos hechos generan una mayor selectividad en las decisiones de compra de los consumidores y un impacto negativo en el poder de compra total. Las familias presentan una menor disposición a asumir deudas; un mayor enfoque en el valor y en la relación precio- calidad; postergando sus decisiones de compra y reduciendo significativamente el gasto familiar.
Actualmente el comercio se enfrenta a desafío crucial que tiene que ver con la actual percepción de desconfianza e inseguridad.
Las empresas y el comercio tienen que restablecer la confianza perdida y fomentar un ambiente de seguridad para sus clientes. Es fundamental para el comercio abordar estas preocupaciones de manera proactiva, implementando estrategias que refuercen la transparencia; la calidad de los productos y servicios; la seguridad en las operaciones comerciales y la tan anhelada Experiencia de compra que engloba todos los sentidos.
Además, es importante adoptar medidas para adaptarse a las nuevas expectativas y necesidades de los consumidores en un entorno marcado por la incertidumbre. La innovación, la tecnología, la atención al cliente y la responsabilidad social empresarial, pueden ser herramientas poderosas para construir y fortalecer la confianza, en medio de desafíos como los que enfrenta actualmente nuestra región.
Durante los últimos meses hemos recibido la visita masiva de argentinos provenientes de Mendoza y Buenos Aires, que ven en nuestro país una alternativa atractiva para la compra de enseres del hogar, ropa deportiva, calzado y marcas a precios muy convenientes con descuentos de hasta un 70% y una moneda de cambio que les favorece, lo cual ha dado un respiro a la industria.
El desafío para el comercio radica entonces, en reconstruir la confianza de los consumidores, ofrecer soluciones creativas y adaptarse a un entorno cambiante y preocuparse de tener un mix que cubra todas sus necesidades. Solo a través de acciones decisivas y orientadas a recuperar esa confianza perdida, el comercio podrá abordar eficazmente los desafíos actuales y prosperar en un contexto complejo y desafiante.
M.Sc Claudio Zepeda,
Gerente General Viña Outlet Park,
Magister en Marketing Univ de Barcelona