Salud Mental en el Trabajo: Un Desafío Urgente

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Jorge Fuentes (1)



Durante el año 2022, la salud mental ocupó un lugar prominente en la lista de preocupaciones en el mundo laboral. Los datos de la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso) nos revelan una realidad alarmante: más de la mitad de los días laborales perdidos debido a enfermedades profesionales se relacionaron con problemas de salud mental. Esto debe ser un llamado de atención para todos nosotros, desde empleadores hasta trabajadores y legisladores.


El informe de la Suseso nos muestra que el sector de "servicios" fue el más afectado, con la mayor cantidad de trabajadores sufriendo enfermedades profesionales de salud mental. Sin embargo, sorprendentemente, no fue el sector económico que tuvo la mayor cantidad de días laborales perdidos por esta causa. Este triste récord fue para el sector de "electricidad, gas y agua", lo que nos recuerda que la salud mental no discrimina en función de la industria.


Un punto de particular preocupación es la diferencia de género en estos diagnósticos. El 64,8% de los casos de enfermedades profesionales correspondieron a mujeres, y ellas también lideraron en el diagnóstico de salud mental, con un abrumador 76,6%. Esta disparidad debe ser abordada con seriedad y sensibilidad.


La Superintendenta de Seguridad Social, Pamela Gana, nos hace un llamado urgente a priorizar la prevención en el ámbito laboral. La prevención no debe ser vista como una mera obligación legal, sino como una parte integral de una empresa exitosa y sostenible. Las organizaciones tienen acceso a asistencia técnica de expertos en prevención de riesgos laborales que pueden ayudar a identificar peligros, evaluar riesgos y tomar medidas para eliminar o mitigarlos.


La importancia de la prevención va más allá del bienestar de los trabajadores; también tiene un impacto positivo en las empresas. Según la OIT, por cada peso invertido en prevención de riesgos laborales, las empresas obtienen un retorno de $2,2. Esto no solo reduce el ausentismo, sino que también contribuye a la productividad general.


Es crucial destacar que, a medida que aumenta la edad de los trabajadores, los días perdidos por salud mental también aumentan. Esto nos indica que debemos implementar estrategias de prevención que se adapten a las diferentes etapas de la vida laboral de los empleados.


La salud mental en el trabajo es un tema que requiere una atención inmediata. Debemos utilizar herramientas como el Cuestionario de Evaluación del Ambiente Laboral y Salud Mental (CEAL-SM) para identificar y abordar los factores estresores en el lugar de trabajo. Solo a través de un esfuerzo conjunto entre empleadores, trabajadores y legisladores podemos garantizar que nuestros lugares de trabajo sean entornos saludables donde la salud mental de todos sea una prioridad. La salud mental no solo es un derecho, sino un pilar fundamental para el éxito y la sostenibilidad de nuestras empresas y la sociedad en su conjunto.


Jorge Fuentes, psicólogo y Director de Pranavida 

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