Durante el año 2017, la actividad económica creció 1,5% con respecto a 2016, siguiendo una tendencia creciente a partir del segundo trimestre, informó esta mañana el Banco Central.
Desde la perspectiva del origen, se observaron incrementos en la mayoría de las actividades, siendo servicios personales y comercio las de mayor contribución al resultado del PIB. En tanto, las principales incidencias negativas provinieron de servicios empresariales, construcción y minería.
Por su parte, las cifras ajustadas estacionalmente evidenciaron una caída en el primer trimestre, con respecto al período precedente, e incrementos en el resto del 2017. En el resultado de los primeros tres cuartos del año, predominó el desempeño de la minería, mientras que en el último trimestre destacó el
incremento de la construcción e industria manufacturera, cuyo efecto también fue relevante en el tercer trimestre. Cabe mencionar que el sector comercio se mostró positivo a lo largo de todo el año, y servicios empresariales, a partir del segundo cuarto.
Desde la perspectiva del gasto, el PIB se vio impulsado por la demanda interna, cuyo efecto fue parcialmente compensado por la caída de las exportaciones netas.
La demanda interna creció 3,1%, impulsada por mayor consumo y, en menor medida, por una acumulación de existencias que alcanzó un ratio de 0,5% del PIB. Por su parte, la formación bruta de capital fijo (FBCF) cayó 1,1%, en respuesta a una menor inversión en construcción y otras obras, que cedió 4,6%.
Comercio Exterior
Respecto del comercio exterior de bienes y servicios, las exportaciones cayeron 0,9%, mientras que las importaciones aumentaron 4,7%. En ambos casos, los resultados reflejaron el desempeño del componente de bienes, principalmente de cobre, en el caso de las exportaciones, y de automóviles, maquinarias y
equipo, textiles y vestuario, en el caso de las importaciones.
En términos desestacionalizados, el efecto de las exportaciones e importaciones de bienes y servicios predominó en el resultado del PIB del primer y tercer trimestre, en tanto, la variación de existencias y el consumo lideraron los aumentos del segundo y cuarto.
Cabe mencionar que el consumo aumentó a lo largo de todo 2017, y que la inversión en construcción y otras obras creció a partir del tercer trimestre.
El ingreso nacional bruto disponible real creció 2,8%, tras exhibir variaciones positivas en todos los trimestres, salvo el primero. En el resultado predominó el aumento de los términos de intercambio, efecto que fue en parte compensado por mayores rentas pagadas al exterior.
El ahorro bruto total ascendió a 22,1% del PIB en términos nominales, compuesto por una tasa de ahorro nacional de 20,6% del PIB y un ahorro externo de 1,5% del PIB, correspondiente al déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos.
De acuerdo con la política de publicación establecida, se reestimaron los resultados correspondientes a 2015, 2016 y 2017, por efecto de las revisiones habituales. En los tres años se observaron revisiones en la tasa de variación del PIB, situándose ésta en 2,3%, 1,3% y 1,5%, respectivamente.