Las exportaciones de bienes de los países del G20 avanzaron durante el segundo trimestre un 2,6%, mientras que las importaciones se estancaron, lo que equivalió a unos importes de 4,81 billones y 4,821 billones de dólares (4,13 y 4,14 billones de euros), respectivamente.
De su lado, las ventas y compras de servicios aumentaron un 4,7% y un 2,9%, lo que elevó las cifras a 1,842 billones y 1,630 billones de dólares (1,582 y 1,4 billones de euros), respectivamente.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el comercio de mercancías mostró "resultados dispares" y "modestos" en el segundo trimestre frente al primero, mayormente, por la "fuerte contracción" de las importaciones en Estados Unidos. De su lado, los servicios se anotaron un "crecimiento considerable".
"Los resultados comerciales del segundo trimestre de 2025 se vieron influidos por la depreciación del dólar estadounidense frente a la mayoría de las monedas y el aumento de la incertidumbre comercial tras los nuevos anuncios arancelarios", ha explicado la OCDE.
En Estados Unidos, las ventas de bienes subieron un 2,7%, impulsadas por el incremento de las ventas de productos metálicos acabados y oro no monetario. Sin embargo, las importaciones se redujeron "drásticamente", un 18,4%, como reflejo del descenso en las compras de suministros industriales.
Por el contrario, el comercio de mercancías registró un "sólido crecimiento" en la mayor parte de Asia y Europa. Las exportaciones e importaciones de China aumentaron un 2,5% y un 4,7%, respectivamente, por los semiconductores y los productos de alta tecnología.
En la Unión Europea, las exportaciones y las importaciones crecieron un 4,7% y un 6,3% con un aumento de las primeras del 7,4% en Alemania, del 6% en Francia y del 5,9% en Italia. El Reino Unido registró un alza del 1,3% en las exportaciones, mientras que las importaciones se dispararon un 8,5% debido a los productos farmacéuticos y automóviles.
Las exportaciones norteamericanas de servicios crecieron un 0,8%, mientras que el crecimiento de las importaciones se mantuvo estable. Al igual que ocurrió con las mercancías, el comercio de servicios experimentó un "fuerte crecimiento" en Europa. Las exportaciones e importaciones de Alemania aumentaron un 9,8% y un 10,6%, respectivamente.