Epic Games se ha vuelto a proclamar ganador de su disputa contra Google por comportamientos monopolísticos, dado que la justicia estadounidense ha desestimado la apelación de Google y ha reiterado el veredicto emitido en 2023, donde se determinó que Play Store y el sistema de pagos de Google incumplen las leyes antimonopolio, por lo que deberá abrir Android a tiendas de terceros.
En el marco del juicio celebrado en 2023, que enfrentó a Epic Games y ha Google por una demanda de monopolio contra el gigante tecnológico, el jurado estadounidense sentenció que la tienda de aplicaciones Play Store y su servicio de facturación ejercen comportamientos monopolísticos.
Como resultado de este fallo, en una orden judicial emitida en octubre de 2024, el juez encargado del caso, James Donato, determinó una serie de medidas que Google debía acatar para estabilizar la situación y favorecer la competencia.
Principalmente, ordenó la apertura de Android y Play Store a tiendas de terceros para permitir que otras tiendas alternativas -como es el caso de Epic- tengan acceso a su catálogo de aplicaciones y puedan descargarlas con las mismas condiciones. Tampoco podría obligar a los desarrolladores a utilizar su sistema de facturación, ni prohibir métodos de pago alternativos.
Google apeló dicha orden y, seguidamente, consiguió que se paralizase la implementación de estas medidas de cara a "mantener un experiencia consistente y segura" mientras se revisaba el caso.
LA JUSTICIA ESTADOUNIDENSE REITERA EL MONOPOLIO
Ahora, el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuido de Estados Unidos ha emitido un nuevo veredicto en el que se ha determinado por unanimidad que la sentencia interpuesta en 2023 es correcta y Google ejerce comportamientos monopolísticos con su tienda de aplicaciones y su servicio de facturación.
Además, se ha determinado Google deberá continuar con la orden de James Donato, que se vuelve a activar y que, por tanto, obligará a la tecnológica a abrir Android y la Play Store a tiendas de terceros. "La moción de suspensión de la apelación se deniega por ser discutible a la luz de nuestra decisión", ha detallado al respecto la jueza a cargo del caso M.Margaret McKeown en el documento de la sentencia.
Con ello, Google Play Store debería estar abierta a la competencia durante tres años y, tendría que distribuir tiendas de aplicaciones de otras compañías, como es el caso de Epic Games Store, así como dar acceso a su catálogo completo de aplicaciones.
Como respuesta, Google ha determinado que volverá a apelar el caso y que se trata de una decisión que "perjudicará significativamente la seguridad de los usuarios, limitará las opciones y socavará la innovación que siempre ha sido fundamental en el ecosistema Android", tal y como ha manifestado la directora global de asuntos regulatorios de Google, en un comunicado compartido con The Verge.
"Nuestra principal prioridad sigue siendo proteger a nuestros usuarios, desarrolladores y socios, y mantener una plataforma segura mientras continuamos con nuestra apelación", ha sentenciado.
FORTNITE VUELVE
Por su parte, el CEO de Epic Games, Tim Sweeney, ha detallado que esta decisión se traduce en una "victoria total" para la desarrolladora de videojuegos y que, por tanto, la tienda de aplicaciones Epic Games Store para Android llegará a Google Play Store.
Así lo ha compartido en una publicación en la red social X, aunque no ha ofrecido detalles sobre el plazo previsto para agregar su tienda de aplicaciones en Play Store.
Esto se traduce en que los usuarios podrán disponer de la Epic Games Store en sus 'smartphones' Android, sin necesidad de depender de la descarga lateral u otros métodos para instalarla.
ORÍGENES DE LA DISPUTA
Esta sentencia forma parte del caso que comenzó en agosto de 2020, cuando Google y Apple retiraron el videojuego Fortnite de sus tiendas de aplicaciones, después de que Epic Games introdujera un nuevo sistema de pagos independiente.
En concreto, con este sistema, los usuarios podían descargar Fortnite directamente desde Epic Games Store, por lo que la desarrolladora evitaba pagar las tasas que cobran las dos compañías tecnológicas por las transacciones en sus respectivas plataformas.
En este marco, Epic demandó tanto a Google como a Apple bajo una acusación de monopolio por la distribución de aplicaciones en sus tiendas, subrayando que ambas compañías abusan de los beneficios que obtienen por las comisiones que cobran a los desarrolladores cada vez que se descarga una 'app' o videojuego.
Por su parte, Google contrademandó a Epic en octubre de 2021, por entender que el desarrollador incumplió el contrato para distribuir su juego Fortnite en la Play Store, un acuerdo que en ningún momento le impidió obtener beneficios de otras formas de distribución en Android. Todo ello llevó a ambas compañías al juicio mencionado finalizado en 2023.
En el caso del juicio contra Apple, que se celebró en 2021 y giró en torno a los "mercados clave", el resultado no eximió a ninguna de las dos compañías de sus respectivas responsabilidades. Aunque sí se reconoció que Apple llevaba a cabo un comportamiento anticompetitivo.