Ante el cierre de miles de camas hospitalarias por las vacaciones de verano en toda España, Mareas Blancas denuncian que la "aberrante excusa" de las CCAA sean las 'vacaciones sanitarias', un "chollo" que afirman se lleva 20 años padeciendo ya que es consecuencia de ofertar "contratos basura", que finalmente no son cubiertos, para sustituir a los profesionales sanitarios cuando toman sus reglamentarias vacaciones.
"Cuando superaron ese período inicial, descubren el "tesoro oculto". No sustituir, de forma programada, a los profesionales sanitarios por norma. La excusa, no hay personas que acepten nuestros miserables contratos. Se inventaron las 'vacaciones sanitarias'", afirman.
"Como las enfermedades no toman descanso y podemos enfermar en cualquier momento del año, resulta que en los veranos "nos la jugamos", es decir, nuestra salud está en riesgo y así un año tras otro. ¡Indignante! Debemos exigir que se activen todos los elementos para que los malos gestores rindan cuentas o se vayan a casa cuanto antes. Años de experiencia con este método y seguimos mal", continúan en un comunicado.
Otra característica de estas 'vacaciones sanitarias' es el cierre de recursos trascendentales, en este caso afirman que el argumento que suelen utilizar "de forma frecuente" es que se desarrollan obras de rehabilitación, "que cuando las seguimos o no existen o son de escaso contenido". "Nos tratan como si fuéramos idiotas", se lamentan.
El resultado de esa gestión sanitaria veraniega es que, cuando termina septiembre, señalan que las listas de espera diagnósticas, quirúrgicas "y de todo tipo se han disparado y cada vez aumentan más"; mientras que, aseguran, "la medicina privada se frota las manos".
"Todas estas decisiones políticas se toman, dando igual que sean comarcas en las que en verano se reduce la ciudadanía que en las que se multiplican las personas que hay que atender. Evidente prevaricación de quiénes están detrás", añade, sin olvidar la emergencia climática veraniega que hace mucho más vulnerables a amplios sectores sociales.
"Las organizaciones sociales y profesionales nos rebelamos frente a estas aberraciones sanitarias siendo las Mareas Blancas las herramientas que mantienen de forma continuada sin medir esfuerzos la denuncia y exigencia para subsanar de una vez una práctica perfectamente subsanable por gobiernos que pagamos para una gestión eficiente y no enviciada que tiene en su ADN que la salud es un lujo y no un inmenso beneficio social para el país", concluye.