MADRID 12 May. (EUROPA PRESS) - La organización humanitaria Human Rights Watch (HRW) ha pedido este lunes al nuevo Papa, León XIV, que revise el acuerdo de 2018 entre la Santa Sede y las autoridades de China para el nombramiento de obispos y que "presione a Pekín para acabar con la persecución de iglesias clandestinas, clero y feligreses".
"El gobierno chino ha seguido instalando a clérigos afines al Partido Comunista Chino", ha denunciado en un comunicado, citando una noticia del portal AsiaNews sobre los nombramientos anticipados de un obispo y de un obispo auxiliar.
"El Papa León XIV tiene la oportunidad de empezar de nuevo con China para proteger la libertad religiosa de los católicos chinos", ha declarado la directora asociada para el gigante asiático de HRW, Maya Wang, pidiendo al Pontífice que presione "para entablar negociaciones que puedan ayudar a mejorar el derecho a la práctica religiosa para todos en China".
La organización ha denunciado que "el Gobierno chino ha restringido el culto de los 12 millones de católicos del país a las iglesias oficiales" y que "ha perseguido a los católicos que han asistido a 'iglesias clandestinas' o han prometido lealtad sólo al Papa". Además, HRW ha acusado a Pekín de "realizar frecuentes redadas en iglesias clandestinas" y de "detener a clérigos y fieles no autorizados".
"Los católicos chinos que rinden culto en iglesias clandestinas se encuentran entre la 'gente corriente' en la que el Papa León ha dicho que la Iglesia debe centrar su atención", ha señalado Wang, en referencia al contenido de la primera misa del cardenal Robert Prevost como Pontífice. "Es fundamental para la libertad religiosa en China que la Iglesia católica se ponga de su lado, y no del lado de sus opresores", ha agregado.