Es una historia que parece no acabar. El conflicto legal de Boxes Car Center con YPF lleva ocho meses en Instituto de Propiedad Intelectual (INAPI), periodo en que el emprendimiento chileno ha debido enfrentarse al gigante argentino para lograr liberar el uso de la palabra que define su marca.
Lo que más tiene afectado en este momento a Javier Arenas, emprendedor tras este taller de vehículos de alta gama, es que el proceso está siendo dilatado por la compañía argentina, en lo que a su parecer es una estrategia para querer desgastarlo —en todo sentido, emocional y económicamente— y finalmente desista de continuar con el litigio.
Aclara que en este momento el proceso está en etapa probatoria, pero cuenta que a fines de mayo “YPF solicitó ampliar el término probatorio y en atención a la calidad de empresa extranjera les concedieron la prórroga. Además, la compañía trasandina presentó una objeción de documentos porque supuestamente eran copias simples y no les constaba su integridad porque nadie las había validado”. Esto obligó a Arenas a incurrir en nuevos gastos, como por ejemplo, certificar ante notario los documentos objetados.
“Esto extiende el juicio y en consecuencia aplaza la posibilidad de que algún día se anule el registro. Probablemente lo hicieron para dilatar y extender la vigencia del registro en caso de que tengamos éxito. Objetar documentos es lo normal que hace cualquier defensa y dilatar es la estrategia común en casos de nulidad. Mientras no exista sentencia va a seguir vigente el registro de marca”, señala Hans von Marttens, abogado del estudio Ármate Abogados que representa a Boxes Car Center.
A pesar de esto el profesional es positivo. “Nos abre una oportunidad para presentar nuevos medios de prueba porque ellos mismos extendieron el probatorio”, dice. Y agrega que legalmente hay esperanzas, porque “el artículo 20 letra e) de la ley de Propiedad Industrial establece una prohibición del registro de términos genéricos, que describen cualidades de servicios o designan cierta clase de servicios en el comercio. Esta prohibición busca evitar situaciones como la que enfrenta Javier, donde YPF se apoderó del término ‘boxes’, que en el automovilismo alude al espacio para asistencia y mantenimiento de los autos. Lo lógico es que INAPI corrija su error y anule el registro de la empresa argentina”, enfatiza el abogado.
¿Cómo partió esta disputa desigual?
En 2010 YPF registró ante INAPI el término “boxes” y, si bien, normalmente nadie se puede apropiar de un término genérico como este, INAPI por un desconocimiento técnico concedió dicho registro a la petrolera argentina.
A mediados de 2023, cuando Arenas quiso registrar su marca (Boxes Car Center) se evidenció el problema e impidió que el taller de mantenimiento y reparación de vehículos de alta gama, continuara con el proceso. Esto llevó a que en octubre pasado, el emprendedor tomara la decisión de recurrir a esta entidad para solicitar la nulidad del registro realizado por la empresa trasandina de un concepto tan común para el rubro automotriz.
“Estamos en este conflicto legal específicamente con la palabra ‘boxes’, ya que es parte de nuestra marca. Fue desconcertante encontrarme con este imprevisto en ese momento, porque es como apropiarse de la palabra ‘pits’ en el automovilismo o ‘pizza’ en la gastronomía”, explica Arenas.
Investigando más sobre el bloqueo en INAPI, Javier descubrió que se había registrado “YPF Boxes” concepto que utiliza la compañía en Argentina para sus lubricentros en estaciones de servicio. Sin embargo, lo insólito es que también se apropiaron de la palabra “boxes” a secas.
“Estamos apelando porque la palabra ‘boxes’ es genérica y cualquiera la puede usar. Además, nuestra actividad es diferente a la de ellos; somos un taller mecánico especializado en mantenimiento y reparación integral, no solo en cambio de aceite”, aclara el emprendedor afectado, quien tendrá que seguir esperando un fallo que le permita continuar con su marca que ha demorado cuatro años en posicionar.