Sr. Director:
Me veo forzado a rectificar y desmentir la carta de Rodrigo Andreucci, quien omite sus conflictos de interés desde que es abogado del proyecto inmobiliario Makroceano que está detenido por la Corte Suprema por no contar con permiso ambiental alguno dada la afectación que causa al campo dunar de Concón.
Tras la defensa de las dunas impulsada por la Fundación Yarur Bascuñán y la Corporación Pro Defensa del patrimonio histórico cultural de Viña del Mar por más de 10 años, la Corte Suprema falló que cualquier construcción en las dunas y sus alrededores deben tener estudio de impacto ambiental. La misma Corte Suprema dijo, en un fallo de 2019, que había riesgo de colapso en las dunas por causa de lluvias(socavones), o por un terremoto grado 7, más aún considerando que Chile es un país sísmico.
Además, hay numerosos informes de Sernageomin, geólogos, arquitectos, biólogos, ingenieros ambientales y otros de 2012 en adelante, que entregaban evidencia de los riesgos de construir en la zona del campo dunar.
La destrucción de las dunas ha sido liderada por Reconsa, que urbanizó con cemento las dunas, con el apoyo y omisión de las alcaldías de Viña del Mar y Concón. Y ahora, los vecinos están sufriendo las consecuencias, al tener que abandonar sus viviendas que ahora son inhabitables. Todo lo expuesto es claro, prístino y evidente, no se necesitan aclarar los fallos judiciales y, tampoco la necesidad (ahora urgente) de proteger la duna.
Gabriel Alonso Muñoz Muñoz
Abogado
