Rispal afirma que "la cooperación europea es la manera más eficaz de luchar contra el terror"
MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
La embajadora de Francia en España, Kareen Rispal, ha ensalzado este jueves el espíritu de superación y "el deseo de vivir" de una sociedad francesa que "se volvió a levantar" tras los atentados yihadistas de 2015 en París, que mataron a 130 personas hace ahora diez años, en el que fue el peor ataque en territorio galo desde la II Guerra Mundial.
"Nuestro pueblo se volvió a levantar, gracias a su resiliencia y gracias también a la valentía de nuestras fuerzas de seguridad, a la acción decidida de nuestra justicia", ha destacado la embajadora en un acto de recuerdo a las víctimas, con motivo del décimo aniversario, que se ha celebrado este jueves en la sede en Madrid del Instituto Francés.
Rispal ha recordado que durante aquella noche del 13 de noviembre de 2015, los ataques --tres en total de manera simultánea en varias zonas de París-- hirieron "el corazón" de la capital francesa, pero también de todo el país. "Nunca olvidaremos esas caras, esas trayectorias interrumpidas, esa juventud que se había reunido para vivir y festejar", ha recordado.
No obstante, ha destacado que los franceses supieron salir adelante y como ejemplo ha recordado cómo París sirvió de sede a los Juegos Olímpicos de 2024 "bajo el signo de la paz y de la fraternidad" y "demostraron que ningún miedo, ningún odio podría doblegar" el "deseo de vivir juntos".
"Ahí donde la violencia quiso sembrar la división, la juventud del mundo se juntó con alegría, esfuerzo y respeto", ha puesto en valor la embajadora francesa, quien ha querido también agradecer el trabajo de las fuerzas de seguridad y del sistema judicial durante estos años, así como de Fiscalía Nacional Antiterrorista, creada en 2019 como "imagen de esta exigencia de verdad y de justicia".
Rispal también ha tenido palabras de gratitud para España. "Habéis compartido nuestra pena, nos habéis apoyado al conocer desgraciadamente lo que es el terrorismo", ha dicho la embajadora, que también ha recordado los ataques del 11 de marzo de 2004 en Atocha, donde fallecieron 192 personas.
"Nuestros dos países están unidos por el mismo compromiso de defender la paz, la democracia y la dignidad humana. Estamos convencidos de que la cooperación europea es la manera más eficaz de luchar contra el terror", ha dicho, acompañada por la subdelegada del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Pilar Trinidad, y el segundo teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, Borja Fanjul.
"En este día de contemplación, rindo homenaje a las víctimas, a sus familias, y a todos aquellos que, cada día, trabajan para que la vida, más fuerte que el miedo, siga. Acordémonos juntos. Defendamos nuestros valores. Y hagamos que siempre triunfe la vida sobre el miedo", ha enfatizado la embajadora.
DIEZ AÑOS DE LOS ATAQUES TERRORISTAS DE PARÍS
Francia conmemora este jueves el décimo aniversario de los atentados perpetrados el 13 de noviembre de 2015 en la capital, París, una serie de ataques coordinados por parte de integrantes del grupo yihadista Estado Islámico en varios puntos de la ciudad que dejaron al menos 130 muertos y más de 400 heridos, los peores perpetrados en el territorio del país europeo en su historia.
Los atentados, que arrancaron con tres suicidas inmolándose en los alrededores del Stade de France en Saint-Denis tras no poder acceder a las instalaciones durante un partido internacional, continuaron con ataques contra cafeterías y restaurantes y con un asalto contra el teatro Bataclán, donde el grupo estadounidense Eagles of Death Metal estaba dando un concierto, que se convirtió en el lugar con más víctimas.
La matanza en la sala Bataclán, que se saldó con 90 muertos y cientos de heridos, incluyó una toma de rehenes durante el concierto, en el que estaban presentes cerca de 1.500 personas, hasta que las fuerzas especiales lograron irrumpir en el teatro y matar a los terroristas, uno de los cuales se inmoló durante el tiroteo.
Los ataques fueron perpetrados por tres grupos distintos de terroristas, siete de los cuales murieron durante los atentados, mientras que otros tres murieron días después en una redada policial en Saint-Denis, entre ellos Abdelhamid Abaadoud, considerado el 'cerebro'. El único superviviente, Salah Abdeslam, nacido en Bruselas, fue detenido en 2016 en Bélgica y condenado en 2022 a cadena perpetua por su papel en los atentados.
La autoría de los atentados fue reivindicada por Estado Islámico asegurando que eran una venganza por los bombardeos franceses contra objetivos del grupo yihadista en Irak y Siria, donde su entonces líder, Abú Bakr al Baghdadi, había declarado un 'califato' tras una ofensiva relámpago desde el norte del territorio iraquí.