Señor Director:
Mientras el país enfrenta graves desafíos en violencia, salud y educación, avanza silenciosamente otra crisis: el desempleo ejecutivo. Poco se habla de los profesionales que, tras décadas de carrera, llevan meses o más de un año buscando trabajo sin éxito.
No es solo la pérdida de ingresos: hay hipotecas, créditos, colegios y salud que cubrir. La liquidez desaparece, junto con la estabilidad emocional y familiar.
La angustia erosiona la autoestima y apaga la esperanza. Las consecuencias afectan a toda la familia. La búsqueda prolongada estigmatiza.
Chile necesita urgentemente reactivar su economía y generar más empleos. Nos encontramos con ejecutivos abiertos a bajar rentas, pero no hay oferta laboral suficiente y formal para capturar ese talento hoy disponible en el mercado.
Urge que sociedad, empresas y Estado reconozcan y actúen frente a esta crisis invisible.
Paz Ovalle
Socia HO Partners