Carlos Díaz Ojeda, General Manager de DispatchTrack Latinoamérica.

Escasez de camioneros y logística

|

Sr. Director:


La escasez de conductores de camiones se sigue agudizando año a año en Chile y en el mundo. Según el último informe de la Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU), actualmente en el rubro hay 3,6 millones de vacantes sin cubrir en 36 países. Esta cifra ilustra un tema que ya no es nuevo: la falta de relevo generacional en el sector y el envejecimiento de la fuerza laboral, lo que responde a una combinación de diferentes factores, como largas jornadas laborales, malas condiciones de descanso, inseguridad en las rutas y exigencias laborales que no se acompañan de buenas condiciones de trabajo.


Esta crisis tiene un impacto directo en el crecimiento económico y la competitividad, pues afecta seriamente el funcionamiento de las cadenas de suministro. Por ende, el comercio. La escasez puede traducirse en un alza en los precios, lo que limitaría el crecimiento de las compañías. Asimismo, pueden experimentarse retrasos e incertidumbre en los despachos, con sus costos logísticos asociados. Incluso, es posible que se generen problemas de abastecimiento, si, con el tiempo, llegan a interrumpirse las cadenas logísticas.


En este escenario, es urgente una respuesta coordinada, con una visión estratégica de esta problemática y su importancia global. En esto, la tecnología es fundamental, pero no para reemplazar la mano de obra especializada, sino que para implementarla en favor de ella. Es decir, para optimizar los servicios, establecer mejores rutas, hacer más eficiente la carga laboral de los conductores y garantizar su seguridad. Este tema debe dejar de tratarse como un contratiempo operativo y afrontarse como la crisis que es.



Carlos Díaz Ojeda, General Manager de DispatchTrack Latinoamérica.


europapress