Una salamandra gigante de mandíbulas fuertes alguna vez excavó túneles en el antiguo suelo del estado de Tennessee.
Dynamognathus robertsoni, la poderosa salamandra extinta descubierta recientemente en el yacimiento de Gray Fossil, tenía una mordida que hacía honor a su nombre. Con aproximadamente 40 centímetros de largo, se sitúa entre las salamandras más grandes que jamás hayan recorrido los antiguos bosques de la región.
Hoy en día, los bosques del sur de los Apalaches son reconocidos por su diversidad y abundancia de especies de salamandras, especialmente las salamandras sin pulmones de la familia Plethodontidae. Solo en Tennessee habitan más de 50 salamandras diferentes, una de cada ocho especies de salamandras vivas.
Las salamandras oscuras, comunes en los arroyos de los Apalaches, probablemente evolucionaron a partir de ancestros excavadores, parientes de la salamandra de las Colinas Rojas de Alabama, una especie grande y subterránea con cuerpo similar a un gusano y extremidades pequeñas. Su diversificación explosiva comenzó hace unos 12 millones de años, dando forma a gran parte de la diversidad de salamandras de la región en la actualidad.
Dynamognathus robertsoni es "la salamandra pletodóntida más grande y una de las salamandras terrestres más grandes del mundo", dijo Davis Gunnin, gerente asistente de Colecciones en el Gray Fossil Site & Museum y la ETSU (East Tennessee State University). Las salamandras oscuras de los Apalaches hoy en día alcanzan tan solo 18 centímetros de largo en su punto máximo. Los investigadores creen que depredadores como este podrían haber impulsado la rápida evolución de las salamandras que habitan en los arroyos de los Apalaches, lo que destaca el papel clave de la región en la diversificación de las salamandras.
"El clima más cálido de Tennessee hace 5 millones de años, seguido del enfriamiento durante las glaciaciones del Pleistoceno, podría haber restringido a las grandes salamandras excavadoras a latitudes más bajas, como el sur de Alabama, donde habita actualmente la salamandra de Red Hills", afirmó en un comunicado Joshua Samuels, couator y profesor de Geociencias en ETSU.
GRAN FUERZA DE MORDIDA
"Este grupo de salamandras posee una anatomía craneal inusual que les confiere una gran fuerza de mordida, por lo que el nombre del género -Dynamognathus-, que en griego significa 'mandíbula poderosa', se le da para destacar el gran tamaño y la fuerza de la salamandra en comparación con sus parientes actuales", explicó el coautor y gerente asistente de colecciones de Museo Shay Maden.
El nombre de la especie, robertsoni, rinde homenaje a Wayne Robertson, voluntario del Yacimiento de Fósiles Gray, quien descubrió el primer espécimen de la nueva salamandra y ha examinado personalmente más de 50 toneladas de sedimentos fosilíferos desde el año 2000.