Astrónomos han sido capaces de detectar actividad molecular en el cometa C/2014 UN271 (Bernardinelli-Bernstein), el más grande y segundo más activo a distancia jamás observado desde la Nube de Oort.
Utilizando el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) en Chile, los investigadores observaron este cometa gigante mientras se encontraba a más de la mitad de su camino hacia Neptuno, a una asombrosa distancia de 16,6 veces la distancia entre el Sol y la Tierra.
C/2014 UN271 es un verdadero coloso, con casi 140 km de diámetro, más de 10 veces el tamaño de la mayoría de los cometas conocidos. Hasta ahora, se sabía poco sobre el comportamiento de estos objetos fríos y distantes.
IMPULSADO POR MONÓXIDO DE CARBONO QUE EMANA DE SU INTERIOR
Las nuevas observaciones revelaron chorros complejos y evolutivos de monóxido de carbono que emanan del núcleo del cometa, lo que proporciona la primera evidencia directa de lo que impulsa su actividad tan lejos del Sol.
"Estas mediciones nos permiten comprender cómo funciona este enorme y gélido mundo", afirmó el autor principal, Nathan Roth, de la American University y del Centro de Vuelos Espaciales Goddard de la NASA. "Observamos patrones explosivos de desgasificación que plantean nuevas preguntas sobre la evolución de este cometa a medida que continúa su viaje hacia el sistema solar interior".
El telescopio ALMA observó C/2014 UN271 captando la luz del monóxido de carbono en su atmósfera y el calor (emisión térmica) cuando el cometa aún se encontraba muy lejos del Sol. Gracias a la alta sensibilidad y resolución de ALMA, los científicos pudieron centrarse en la señal extremadamente débil de un objeto tan frío y distante.
Basándose en observaciones previas de ALMA (Lellouch+2022, A&A, 659, L1), que caracterizaron por primera vez el gran tamaño del núcleo de UN271, estos nuevos hallazgos midieron la señal térmica para calcular con mayor precisión el tamaño del cometa y la cantidad de polvo que lo rodea. Los valores del tamaño del núcleo y la masa de polvo concuerdan con observaciones previas de ALMA y lo confirman como el cometa más grande de la Nube de Oort jamás encontrado. La capacidad de ALMA para medir con precisión estas señales hizo posible este estudio, que ofrece una imagen más clara de este distante gigante helado.
El descubrimiento no solo marca la primera detección de desgasificación molecular en este cometa de récord, sino que también ofrece una visión excepcional de la química y la dinámica de los objetos originados en los confines más remotos de nuestro sistema solar, según un comunicado del NRAO (National Radio Astronomy Observatory).
A medida que C/2014 UN271 se acerca al Sol, los científicos anticipan que más gases congelados comenzarán a vaporizarse, revelando aún más sobre la composición primitiva del cometa y el sistema solar primitivo.