La Comisión Europea ha puesto en marcha una nueva herramienta para vigilar y reaccionar ante el eventual desvío de importaciones hacia la Unión Europea que puedan perjudicar al mercado interior por el efecto de estrategias de terceros, como por ejemplo la guerra arancelaria de Estados Unidos o la sobreproducción de China.
"Las recientes turbulencias en el sistema comercial mundial han aumentado el riesgo de desvío dañino", ha avisado el comisario de Comercio y Seguridad Económica, Maros Sefcovic, quién ha subrayado que la UE es "el mercado más abierto del mundo" pero "no permitirá que medidas comerciales ilegales y unilaterales perjudiquen esta fortaleza clave".
El objetivo es evitar el desvío comercial "perjudicial" que se produce cuando grandes volúmenes de mercancía que ya no pueden entrar en otros mercados por las barreras arancelarias u otras restricciones son "reorientadas" hacia la UE.
Los servicios comunitarios sostienen que con la nueva plataforma dispondrán de información actualizada y precisa a través de datos de las aduanas y con ello se detectarán "rápidamente" cualquier aumento repentino de las importaciones. De este modo, el Ejecutivo comunitario podrá adoptar medidas "tempranas y eficaces" para proteger el mercado común de los efectos adversos.
En este contexto, la Comisión insta a los fabricantes europeos, a las organizaciones industriales y a los Estados miembro a revisar las tendencias que se registren en esta plataforma online, así como a ofrecer información propia sobre el mercado y sobre la situación económica de la industria para que los servicios comunitarios puedan identificar mejor producciones que puedan verse afectadas por los desvíos.