El comisario europeo de Energía y Vivienda, Dan Jorgensen, ha defendido este miércoles que la Unión Europea debe apostar por interconexiones "más sólidas" y por inversiones compartidas para alcanzar el objetivo comunitario de al menos un 15% en 2030 como respuesta al apagón masivo que registró España el 28 de abril y que afectó también a Portugal y parte del sur de Francia.
"Necesitamos trabajar juntos para construir una Unión Europea de la Energía sólida y sostenible, con una mayor integración, interconexiones más sólidas e inversiones compartidas", ha apuntado el comisario durante su intervención en un debate temático sobre el apagón durante la sesión plenaria del Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia).
El político danés ha animado a "asimilar las lecciones" que pueden extraerse del corte de suministro en España antes de insistir en que "los interconectores pueden ayudar a mejorar la resiliencia del sistema, ya que los Estados miembro pueden importar de sus vecinos cuando sea necesario o proporcionar suministros de respaldo para ayudar a prevenir apagones".
Al respecto, el comisario ha recordado que se han completado más de 100 proyectos de interés común en toda Europa, pero ha instado a "ir más allá" e "invertir en proyectos de energía limpia que no sólo satisfagan las ambiciones climáticas, sino también las de los hogares y empresas, al suministrar energía más asequible y más segura".
"Los recientes apagones nos recuerdan que la seguridad energética nunca puede darse por sentada", ha indicado Jorgensen, quien ha resaltado también "la importancia de la solidaridad en tiempos de crisis" al tiempo que ha lamentado que algunos grupos en la Eurocámara hayan utilizado el debate como "una excusa para atacar a las renovables" cuando "no hay una base que lo pruebe".
En este sentido, ha precisado que "incluso si los fósiles fueran la mejor manera, por razones de seguridad y precios, de generar energía, que no lo es, Europa todavía tendría la obligación de alejarse de ello para proteger a sus ciudadanos ante el cambio climático".
DEBATE DE LOS EURODIPUTADOS
Durante su intervención en el debate, la eurodiputada 'popular' Dolors Montserrat, ha acusado del retraso en las interconexiones con Europa a la vicepresidenta de la Comisión responsable de Transición Justa, Teresa Ribera, y al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a quienes ha responsabilizado también de la falta de protección energética y de la "demonización" de la nuclear.
En respuesta, el eurodiputado socialista Nicolás González ha reivindicado la necesidad de completar las interconexiones en Europa y ha acusado a los 'populares' de dedicarse a "atacar los intereses de España y Europa" en lugar de abogar por la modernización de las redes, de atacar a renovables, que "son una parte indiscutible del futuro de España" y de haber creado "un falso debate entre nucleares y renovables".
"La imposición forzada de renovables sin planificación y con expropiaciones masivas, sin invertir en la estabilidad del sistema y el desmantelamiento de las nucleares nos condenan a la oscuridad", ha lamentado, por su parte, el eurodiputado de Vox Jorge Buxadé, quien ha acusado al Gobierno de "sumisión al fanatismo climático".
En la misma línea, el exmiembro de Se Acabó la Fiesta (SALF) Diego Solier ha destacado el papel de la energía nuclear en el mix energético y ha defendido que "la transición energética no puede ser una religión, no puede basarse en prohibiciones ni en persecuciones ideológicas". "Europa necesita energía limpia, sí, pero también estable, asequible y realista", ha apostillado.
Por contra, la portavoz de Sumar en la Eurocámara, Estrella Galán, ha insistido en que "la solución no es la energía nuclear, que está demostrado que es contaminante, costosa y de alto riesgo", sino que "pasa por una red eléctrica 100% pública y verde, que ponga fin a los privilegios de las energéticas".
"España necesita una empresa pública de energía y prohibir que las grandes eléctricas se repartan un solo euro de beneficios hasta que paguen todos los costes del apagón", ha abundado, por su lado, la eurodiputada de Podemos Irene Montero, quien ha aprovechado su intervención para subrayar que "seguridad no son más armas, son más servicios públicos".