Sr. Director,
Con la ley de seguridad privada promulgada se dio inicio al proceso de modelamiento y redacción del reglamento, donde el gremio de la industria (ASEVA) junto a otros organismos, ha representado los alcances que se deben considerar para la elaboración de un documento robusto que permita operativizar de buena forma la nueva normativa.
El texto da mejores definiciones para que las entidades obligadas puedan implementar medidas de resguardo de sus recintos. Esto asoma como uno de los principales desafíos del reglamento, ya que definirá la categorización de riesgo de cada espacio.
Estas medidas deberán incorporar tecnología de punta, como lectores de patentes, cámaras de reconocimiento facial y sistemas de televigilancia 24/7, componentes necesarios para fortalecer el trabajo realizado por el personal que realiza las tareas de seguridad, solo por nombrar algunas. Otro aspecto relevante es poder agilizar los procesos de formación, capacitación y acreditación de guardias y vigilantes, considerando que el 50% de los componentes de la seguridad privada no tiene su credencial al día.
La mejor formación y especialización repercutirá positivamente en la profesionalización de la industria lo que da pie para enfrentar un escenario auspicioso, lleno de desafíos, pero hoy el principal es tener un reglamento robusto, que incorpore las visiones de los distintos actores de la industria y que siente las bases de un funcionamiento ágil, eficiente, profesional, ético y colaborativo de la industria.
Hugo Ibaceta Cerda,
Presidente de la Asociación de Empresas de Seguridad Privada y Transporte de Valores (ASEVA)