Protección de los bosques y responsabilidad de las empresas
El Día Internacional de los Bosques se celebra cada año el 21 de marzo para concientizar sobre la protección de las áreas verdes, que actualmente son fundamentales para combatir los efectos negativos del cambio climático y además, contribuyen al logro de muchas metas contempladas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU gracias a sus beneficios ecológicos, económicos y sociales.
El problema es que los bosques se encuentran amenazados por diversos factores, entre ellos el abuso de sus recursos, los incendios forestales, la sequía, las plagas y una deforestación excesiva. Por ejemplo, de acuerdo a un reporte de Environmental Paper Network publicado en 2021, el consumo de papel alcanza hoy niveles insostenibles y se está incrementando en todo el mundo, excediendo los 400 millones de toneladas anuales.
Por eso, como empresas preocupadas de la sostenibilidad y de generar un impacto social positivo a través de nuestras acciones, debemos preguntarnos qué estamos haciendo al respecto y qué medidas podemos comenzar a aplicar para proteger aún más los bosques. El desafío es enorme: Según datos del reporte “El esfuerzo colectivo para poner fin a la deforestación”, lanzado en 2021 por CDP, sólo el 1% de las empresas estaba utilizando mejores prácticas para el cuidado de los bosques y desde 2015 a la fecha, la misma CDP estima que se han perdido anualmente 10 millones de hectáreas de bosque.
Para avanzar, lo primero que tenemos que reconocer es la relevancia que tienen las áreas verdes para proveer bienes y servicios tangibles e intangibles. Lo más obvio son la madera y el papel, pero también son el soporte para la existencia de plantas comestibles y medicinales. Los bosques ayudan a regular el clima al absorber el dióxido de carbono de la atmósfera y producir oxígeno, evitan la erosión del suelo y las inundaciones, incluso aportan al bienestar mental de las personas como zonas recreativas.
Conservarlos es tarea de todos y las empresas tenemos un rol importante que cumplir aplicando prácticas sostenibles en el uso de los bosques de varias maneras, por ejemplo, a través de certificaciones de organizaciones independientes que verifiquen que la gestión forestal es sostenible; mediante la adopción de medidas que protejan y mejoren la biodiversidad de los bosques; con la implementación de políticas que eviten el desperdicio y la pérdida de materiales en la producción de productos forestales; o buscar la incorporación de fuentes alternativas de materiales que no provengan de áreas de deforestación para reducir la dependencia de la materia prima que proveen los bosques.
A nivel macro existen varias otras acciones que podemos impulsar para resguardar el medio ambiente y los bosques. Los gobiernos pueden hacer estas metas parte de sus políticas de crecimiento sustentable, y también es factible formar alianzas público-privadas con el sector privado y organizaciones ambientales para desarrollar proyectos de conservación y restauración de bosques, así como para promover prácticas sostenibles en sus cadenas de suministro.
Desde un punto de vista de manejo interno, es recomendable que cada empresa analice en detalle los procesos asociados a su gestión y se promueva adoptar prácticas sostenibles en las operaciones como reducir el uso de papel y energía, reemplazarlos por opciones sustentables, minimizar la emisión de gases de efecto invernadero, establecer programas de reciclaje o valorizar los residuos orgánicos para garantizar a los clientes una correcta biodegradación en compostaje industrial.
Ojalá todos podamos comprender que los bosques son fundamentales para el equilibrio ecológico global, para que cada día más personas y organizaciones sean conscientes de los desafíos pendientes en torno a su protección. Además, al ser la industria forestal uno de los pilares de la economía, las empresas chilenas tenemos un rol clave que desempeñar en el cuidado y conservación de los bosques para asegurar el desarrollo y la sostenibilidad del país. Esta no es una tarea que no podemos postergar, debemos ocuparnos hoy y cuanto antes lograr una sociedad más sostenible, responsable y sustentable.
Ignacio Parada,
CEO y fundador de BioElements
