B. Central presentó nuevo Informe de Sistemas de Pagos

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Banco Central

El Banco Central (BCCh) presentó este jueves el Informe de Sistemas de Pagos, un nuevo reporte que tendrá una frecuencia anual, a través del cual el ente emisor comunicará su evaluación del seguimiento del funcionamiento de los medios de pago e infraestructuras de mercado financiero, así como tendencias y desarrollo futuro.

De acuerdo al estudio, la forma en que las personas pagan sus transacciones cotidianas está cambiando en Chile. Al igual que en muchos otros países, el uso del efectivo como medio de pago disminuye, mientras la tenencia y uso de medios de pago electrónicos aumenta. La profundidad del mercado de pagos minorista es considerablemente superior a la de la década pasada, y en lo más reciente la pandemia ha incidido en un mayor uso de medios de pago digitales y de transacciones no presenciales.

El documento constata que “también están cambiando las relaciones entre los distintos participantes del sistema de pagos minorista. La mayor digitalización de la economía y de los pagos es una tendencia global, pero a nivel local se están produciendo cambios importantes en la estructura y funcionamiento del mercado de pagos de bajo valor, los que se relacionan con desarrollos del sector privado y con cambios normativos.”


Efectos de la crisis sanitaria

El Central apunta que “la crisis sanitaria del Covid-19 y las posteriores respuestas de política han repercutido también en la actividad de los Sistemas de Pago de Alto Valor (SPAV) y en las principales Infraestructuras del Mercado Financiero (IMFs) locales. Las políticas de liquidez implementadas durante 2020 por el BCCh llevaron a que los pagos propios del Banco Central en el Sistema LBTR presentaran alzas históricas. Por otra parte, los retiros de ahorros previsionales implicaron un incremento de los depósitos vista y con ello de las operaciones entre los bancos y el Banco Central, por concepto de Reserva Técnica.”

A su vez, sostiene, “la actividad en los sistemas de liquidación y compensación de instrumentos financieros y pagos asociados a los mismos, fue reflejo del comportamiento de los mercados financieros en el período. El menor dinamismo en el mercado de renta fija durante los retiros de ahorros previsionales llevó a una disminución de los instrumentos procesados por la cámara de compensación de valores (CCLV). Algo similar ocurrió con la compensación de derivados fuera de bolsa (ComDer), si bien registra una leve alza para fines del 2021.”

De esta forma, la autoridad estima que “en general, los resguardos financieros y estándares de riesgo de las distintas Infraestructuras respondieron adecuadamente al mayor flujo de operaciones así como a las mayores percepciones de riesgo por parte de los participantes del mercado financiero. El mayor flujo de pagos durante la pandemia hacia los SPAV, incluyendo la Cámara de Compensación de Alto Valor (CCAV), administrada por ComBanc, y el Sistema LBTR no generó disrupciones relevantes en la disponibilidad de servicio, manteniéndose sobre los estándares operacionales recomendados. Igualmente positiva es la evaluación de los indicadores de riesgo operacional durante la crisis social y pandemia, donde hubo cambio de horarios y ajustes de personal, e implementación de planes de continuidad operacionales, entre otras acciones tomadas por los operadores, y monitoreadas por la Comision para el Mercado Financiero (CMF) como fiscalizador. Por último, se presentaron aumentos históricos en las garantías constituidas en la CCAV y en las cuentas de margen de los sistemas de compensación y liquidación de instrumentos financieros.”

Hacia adelante, el ente emisor prevé que “los avances tecnológicos seguirán permitiendo que los medios y sistemas de pago continúen con una acelerada evolución, y la creciente participación de entidades no bancarias como proveedores de medios de pago minoristas y participantes en los SPAV también supone desafíos. Los pagos instantáneos pueden aumentar la inclusión financiera y la eficiencia de los sistemas de pagos de bajo valor, mientras que la irrupción de activos digitales emitidos por entidades privadas -o por los bancos centrales- podrían producir transformaciones importantes en los sistemas de pago. Ello requiere de IMFs que sustenten distintas formas de pagar, lo que debiera llevar, por ejemplo, a una extensión en el funcionamiento del Sistema LBTR tanto en términos de horas, como hacia entidades no bancarias que de manera creciente ocupan roles relevantes en el funcionamiento del sistema de pagos”.

europapress