​Portafolio de Inversiones: cambios en renta fija y variable este mes

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Bolsa de valores


El Departamento de Estudios de Inversiones Security entregó este martes su reporte de Portafolios de Inversiones de agosto. Según plantea la institución, “cifras más recientes muestran que la reapertura (económica) ha llevado a una recuperación, aunque con heterogeneidad (...) Esto pone un signo de interrogación respecto al optimismo en torno al crecimiento del tercer trimestre. Nuestro escenario base sigue siendo uno de cautela y mantenemos la recomendación de tener una posición neutral entre renta variable y fija. Movemos la sobreponderación de Asia Emergente a la Eurozona y agregamos la preferencia por EE.UU., ambas en desmedro de la renta variable local.”

A continuación el detalle de sus recomendaciones:


Renta Fija Internacional: “Las últimas reuniones de política monetaria de los principales bancos centrales a nivel global han ido confirmando dos cosas, que las condiciones actuales de liquidez abundante, a través de tasas cortas muy bajas, esfuerzos por aplanar la curva y compras de activos, se mantendrán por bastante tiempo. Segundo, que aunque el escenario sigue siendo incierto, la vara para aplicar más estímulo ha ido subiendo. Así, en el balance esperamos una estructura de tasas base que seguiría plana, lo que permite tomar más riesgo de duración, buscando spreads más atractivos.”

“Seguimos creyendo que la combinación de duración y spreads se da de mejor forma en instrumentos en dólares de empresas latinoamericanas, los que si bien han seguido ajustándose y ya no se ven tan “baratos” según nuestras métricas de valuación, presentan mejor relación riesgo-retorno, especialmente al compararlos con el segmento High Yield estadounidense o europeo. En resumen, mantenemos la preferencia por los spreads de Latinoamérica, que entregan mayor exposición a duración, un devengo atractivo y permiten pensar en ganancias de capital ante un avance en la recuperación (y los flujos de capital) de la región.”


Renta Fija Local: “En las últimas semanas las expectativas de inflación han subido, especialmente las de corto plazo. En efecto, a un año plazo pasó desde 1,1% a 1,8%, y los precios de mercado ya no anticipan IPC negativos. A nuestro juicio, dentro de las razones que estarían explicando este incremento se encuentran: la gradual flexibilización de las restricciones a la movilidad y la expectativa de que siga disminuyendo el confinamiento con el correr de los meses, la recuperación global que ha impulsado el precio de las materias primas (incluido los combustibles) y la constatación de alzas en alimentos tanto perecibles (por estacionalidad) como no perecibles (probables restricciones de oferta)”.

“Otro factor que podría estar incidiendo es el retiro de fondos previsionales, ya que una parte de ellos iría a mayor gasto corriente, y dentro de ello una porción a transables (sin efecto) y otra a no transables que impulsaría la inflación, aunque eso depende también de la brecha de capacidad. En definitiva, van quedando atrás las expectativas desinflacionarias derivadas de la brusca paralización de la actividad económica, y se va validando un escenario algo más inflacionario, situación que prevemos podría continuar en el corto plazo, lo que nos lleva a ratificar la recomendación de preferir UF sobre nominales.”


Renta Variable Internacional: “La caída en las bolsas de marzo combinó varios elementos, liderados por la expectativa de una crisis global que ya se refleja en los números, complementado por un apretón de liquidez transversal y poca veces visto. La recuperación tuvo más que ver con el alivio de este último factor, gracias a los bancos centrales, al tiempo que las perspectivas de crecimiento (PIB y utilidades) ha cambiado menos.”

“No esperamos demasiado estímulo monetario adicional, aunque en términos de nivel se mantendría muy expansivo. Por otro lado, la política fiscal deberá consolidar el rol que le toca para que las economías sobrevivan y se reactiven. Para esto, a su vez, será muy importante que los procesos de reapertura avancen, ya que el miedo de los hogares (y la reticencia a gastar) es uno de los elementos más importantes para pensar en una reactivación. Tomando estas señales, avanzamos en el ciclo (geográfico) de recuperación y movemos la preferencia de Asia emergente a la Eurozona, a lo que agregamos una sobreponderación de EE.UU., principalmente por el rezago que mostró respecto a sus pares en los últimos meses y a las mejores noticias respecto a la estabilización de contagios en algunos estados.”


Renta Variable Local: “Los factores que más han pesado en los movimientos reciente se asocian con la mejoría del entorno externo, mientras que a nivel local, la presión inicial sobre el mercado por la aprobación del retiro del 10% de fondos de pensiones cedió hacia el cierre del mes.”

“Las expectativas de crecimiento del consumo privado se ajustaron al alza, lo que nos lleva a estar más optimistas en la recuperación de resultados de las compañías del sector comercio y reducen la presión sobre el riesgo de las carteras de consumo de la banca. El periodo de entrega de resultados del segundo trimestre no ha tenido sorpresas relevantes, aunque las estimaciones apuntan a una caída del Ebitda bajo cobertura cercana a -35% a/a.”

“Realizamos ajustes moderados a las carteras, que reducen parte de la exposición al sector forestal, la que se traspasamos a SQM-B. también reducimos la exposición al sector eléctrico, lo que se transfiere a sectores ligados a demanda interna.”

“En términos de sesgos, las carteras mantienen una sobreponderación de los sectores ligados a commodities (demanda externa), una subponderación del sector bancario, mientras que se lleva a una posición neutral al sector retail, en medio de un relativo mayor optimismo para el periodo de recuperación post pandemia.”

europapress