Estados Unidos y China han alcanzado este domingo un "principio de consenso" para aliviar las tensiones sobre el tráfico de fentanilo y los impuestos a la navegación tras dos días de extensas conversaciones en Kuala Lumpur (Malasia) durante la cumbre de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN).
El negociador chino Li Chenggang ha confirmado que ambas partes han mantenido conversaciones "francas y constructivas" sobre temas como el control de las exportaciones, la extensión de la tregua arancelaria, la expansión del comercio bilateral y el rol de China en la producción de químicos primarios que acaban indirectamente empleados en el tráfico de fentanilo.
Li también ha descrito las conversaciones como intensas y la postura estadounidense como firme, pero elogió los avances en las mismas. Ambas partes informarán ahora del resultado a sus líderes antes de la cumbre prevista para el jueves entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder chino, Xi Jinping.
"Lo que no queremos ver son turbulencias y los giros inesperados como los que están ocurriendo", ha declarado Li en una comparecencia recogida por la agencia Bloomberg, donde ha resaltado que una relación comercial y económica estable entre China y Estados Unidos beneficia a ambos países y al resto del mundo.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, declaró previamente a la prensa en Kuala Lumpur que las conversaciones fueron "constructivas, de amplio alcance y profundas" y crearon un "marco muy positivo" para el encuentro entre los líderes.
Bessent, sin embargo, no mencionó ningún acuerdo sobre nuevas tarifas portuarias estadounidenses para los buques chinos, que se ha convertido en una nueva fuente de fricción en las relaciones.
La delegación china estuvo encabezada por el viceprimer ministro He Lifeng e incluyó al viceministro de Finanzas, Liao Min. El representante comercial, Jamieson Greer, también formó parte del equipo estadounidense.
El presidente estadounidense tiene previsto celebrar reuniones bilaterales en los próximos días en Japón y Corea del Sur, donde también se espera que se reúna con el presidente chino, Xi Jinping, en el marco de la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico.
Trump, en declaraciones a la prensa a bordo del Air Force One, expresó su esperanza de que las conversaciones con Xi den como resultado "un acuerdo completo".
La reunión sería el primer encuentro cara a cara entre los líderes de las dos mayores economías este año. Trump ha afirmado que las conversaciones directas son la mejor manera de resolver problemas como los aranceles, las restricciones a las exportaciones, las compras agrícolas, el tráfico de fentanilo, puntos de conflicto geopolítico como Taiwán y la guerra en Ucrania.
"Hablaremos de muchos temas. Creo que tenemos muchas posibilidades de llegar a un acuerdo muy completo", afirmó.
Entre los posibles temas de la agenda se encuentra la política de Estados Unidos hacia Taiwán. Xi ha presionado a Washington para que declare oficialmente que se opone a la independencia de la democracia autónoma, una concesión que representaría una importante victoria diplomática para Pekín.