MADRID 12 Ago. (EUROPA PRESS) - El Gobierno de Filipinas se ha mostrado "enormemente preocupado" por las "peligrosas maniobras" llevadas a cabo el lunes por buques militares chinos en aguas del mar de China meridional, insistiendo en que se trata de una zona "bajo soberanía filipina", en contra de las tesis de Pekín.
Todo comenzó, según el Ministerio de Exteriores de Filipinas, durante una "operación humanitaria de rutina" en la que un barco de la Guardia Costera colaboraba con pescadores en el bajo de arena de Masinloc, también denominado atolón de Scarborough. China movilizó varias embarcaciones que, según Filipinas, terminaron chocando entre sí durante una persecución.
El incidente "demuestra la importancia de respetar las normas marítimas internacionales", ha advertido el Ministerio de Exteriores filipino, en un comunicado en el que, aunque se ha mostrado a favor de "la diplomacia y el diálogo", también ha dejado claro que no reducirá su presencia naval.
Filipinas, ha añadido, "no escatimará esfuerzos para proteger su soberanía y su jurisdicción conforme al Derecho Internacional".