Conveniencia para Chile de asociarse al BRICS +

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Miguel brunaud

Hace un tiempo escribí un artículo con motivo de la ampliación del BRICS y que hoy se traduce en la conformación por sus cinco fundadores y los nuevos Estados que corresponden a Irán, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Etiopía, formando el BRICS +, potenciado el acrónimo que acuñó Jim O”Neil de Goldman Sachs.


Mi planteamiento decía relación con la conveniencia para Chile de incorporarse a esta organización o seguir con la política comercial vigente, que nos hace mirar más hacia USA y la UE, con la contradicción que China es nuestro principal socio.


Hoy los tiempos no están para darse gustitos ideológicos, como no adherir por el hecho que lo integra Rusia, y nos simpatiza Ucrania, ya que el interés de Chile debe estar en los factores geopolíticos que determinan la conveniencia de adherir al grupo. No importa si debo darle la mano a Putin, sino lo que interesa es vender nuestra producción a un mercado de más de 3.000 millones de habitantes.


Pensemos la importancia que tiene para nuestra economía pasar a formar parte, da lo mismo en que calidad, de este bloque económico que hoy representa el 51% de la población y el 40% del PIB mundial, que por lo demás, ostentan el 40% de la producción de gas y el 45% del petróleo.


Hemos quedado atrás en materia de atracción de inversión extranjera, explotación de minerales y desarrollo tecnológico, por lo que unirse al BRICS + no me parece una mala idea, ya que se puede ser socio de todos, sin perder nuestra identidad y autonomía.


Chile debe observar los avances del grupo y por supuesto asistir a la próxima cumbre que se desarrollará en Brasil, el próximo 6 y 7 de julio, ya que se vislumbra un gran potencial exportador hacia las economías que lo conforman.


En el orden financiero la idea es que el NDB (New Development Bank) cumpla con el apoyo crediticio de sus miembros, y compita con el FMI y el Banco Mundial, guardando las proporciones, si consideramos que los créditos otorgados alcanzan los US$5.000 millones, comparados con los US$72.000 millones que otorga el Banco Mundial. Queda pendiente que se concrete la moneda común del bloque que cumpla el anhelo de la desdolarización mundial.


Por supuesto que integrarse a este bloque no solo trae ventajas, y por ende, habrá que tener claro los riesgos aparejados, en lo político, convivir con regímenes autoritarios, y en lo económico, invasión de productos chinos e indios a bajo precio, pérdida de capacidad de innovación, represalias de USA que impliquen quedar sin beneficios y cooperación tecnológica, entre otros.


Pero sumando y restando, a todas luces, me parece conveniente explorar la posibilidad de unirnos a este grupo, ya que se vienen tiempos aún más difíciles para Chile, atendido que nuestros vecinos nos llevan delantera en atracción de capitales, lo que nos obliga a sumar destinos para nuestras exportaciones.


Miguel Brunaud Ramos 

Profesor de Derecho Económico

Facultad de Derecho de la Universidad de Chile

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