Informe Macroeconómico Coyuntural

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VICTOR SALAS

En el inicio del tercer trimestre del año, la coyuntura económica sigue evidenciando que la economía se encuentra en crecimiento, aunque levemente por sobre el nivel de tendencia (2%), y con una inflación anual por ahora del 4,6% anualizada, mucho más alta que las estimadas a fines del año pasado, por lo que el Banco Central, en julio, decidió aplicar el primer freno al ciclo de recortes de la TPM, y hasta la fecha (agosto 19) ha dejado la tasa en 5,75%, con bajas perspectivas de cambiarla en los próximos meses, lo que mantiene una alta tasa de interés de colocaciones bancarias, situación que bien sabemos afecta a la recuperación económica (altas tasas de interés mantienen altos los costos de operación de los productores y también desincentivan el consumo y la inversión) 


Efectivamente, la actividad económica medida por IMACEC, está perdiendo su ritmo y se está estancando alrededor del 2%, pero se espera que se recupere algo en el año. El IMACEC de junio tuvo un crecimiento de 0,1%. Muestra tendencias de moverse alrededor del 2%, por debajo, pero se espera que el segundo semestre pueda recuperarse levemente por sobre el 2%. 


El comportamiento del IMACEC permite inferir que aún es incierto el nivel que alcance el crecimiento económico a diciembre de 2024, pero todo indica que las proyecciones de Hacienda y otros organismos oficiales como el Banco Mundial siguen manteniendo firme la expectativa de un crecimiento del PIB local para este año alrededor de 2,4% 


El mercado laboral sigue mostrando debilidad. La tasa de desempleo, en el trimestre móvil abril a junio 2024, se ubica en 8,3%. Pero, mantiene similar tasa que el anterior trimestre, mostrando un leve estancamiento en su reducción. Los empleos perdidos se estuvieron recuperando, pero desde febrero se habían estancado y ahora han estado aumentando de manera progresiva. Desde la USACH estimamos que en Chile faltan algo más 260 mil empleos para tener la misma tasa de empleo prepandemia. Incorporando los empleos faltantes a los desempleados la tasa de desempleo, sube a 10,8%. Todos datos que confirman la debilidad de este mercado


La convergencia de la inflación a la meta del 3% se mantiene en el horizonte de dos años, no obstante, los niveles fueron ajustados al alza para este año y 2025. Estamos muy contentos porque el Equipo del Conversatorio de Política Económica de la Usach hizo, al 30 de julio, estimaciones muy cercanas sobre el IPC general de julio (de 0,67%, implicando con ello una variación de 4,47% en doce meses), mientras el dato oficial, publicado el 8 de agosto, arrojó un resultado de 0,7%, ubicando la inflación en 4,6% anual. Desde el próximo mes publicaremos nuestras estimaciones. En el nuevo contexto, en donde la inflación se aleja de manera alarmante del límite superior del rango meta fijado por el Banco Central, se entiende que la autoridad monetaria haya decidido mantener en 5,75% la Tasa de Interés de Política Monetaria en su última reunión (por primera vez y desde que comenzó el ciclo de recortes). Los datos dejan en evidencia la ralentización del proceso de recorte por la actual evolución de la inflación que no permite vislumbrar un ritmo sostenido de convergencia a la meta del 3%. 


En paralelo, la Reserva Federal de Estados Unidos (la FED) prácticamente ha descartado recortes en su TPM para 2024. Empero, la decisión de la FED sigue pendiente de la evolución de la inflación y del desempleo, variables que han mostrado señales equívocas, las que han generado expectativas extremas contrapuestas, desde estimaciones de recisión (por la fuerte caída en la creación de puestos de trabajo que hizo subir la tasa de desempleo en USA a 4,3%), hasta la mantención de precios altos (IPC de USA de junio 2024 de 3,0% que baja a 2,9% en julio), pero todo ha vuelta a la normalidad, aunque este hecho con toda seguridad hará que este organismo actúe con máxima cautela y no inicie un pronto proceso de recortes de su tasa de referencia. El informe del viernes del Departamento de Trabajo mostró que los empleadores agregaron tan solo 114.000 puestos de trabajo en julio —un 35% menos de lo que esperaban los analistas— y que el desempleo, que ahora asciende al 4,3%, es el más alto desde octubre de 2021. 


La velocidad de ajuste que aplique el Banco Central de Chile dependerá de la evolución del IPC en el tercer trimestre y también de las decisiones de Política Monetaria que adopte la Reserva Federal de Estados Unidos, dado el impacto que tiene el diferencial de tasas en el flujo de capitales y el traspaso cambiario en los determinantes de precios internos en Chile. La FED aún no se decide a comenzar el ciclo de flexibilización monetaria y argumenta que el escenario económico sigue siendo incierto, a lo que deberá sumar la incertidumbre que impone el escenario político, ya que, EE. UU entrará en periodo de elecciones presidenciales en el cuarto trimestre del año. 


Chile y sus principales socios comerciales de occidente están con dificultades en el último tramo para ajustar y proyectar la inflación en el horizonte de dos años a sus respectivas metas, y están siendo muy cautelosos tanto en el traspaso de información al mercado (credibilidad de sus futuras decisiones de política monetaria) como en la ejecución, debido a que el desajuste entre las expectativas y las inversiones realizadas en los distintos sectores económicos puede generar sobre stock de inventarios y exceso de oferta o bien déficit de stock y exceso de demanda, en ambos casos, se afectaría negativamente el mercado laboral formal o el nivel de precios respectivamente, entre otros desajustes que retrasarían el proceso de convergencia a los equilibrios macroeconómicos prepandemia. 


Un factor relevante para Chile es la evolución del Tipo de Cambio, el que se ha mantenido alto y a la vez ha tenido alta variabilidad por precios de materias primas. Al cierre del mes de julio el tipo de cambio respecto al dólar americano registró su nivel más alto desde abril, ubicándose en $937,56 pesos por dólar, equivalente a $20 pesos más que abril y $9 pesos más que junio. En lo que va de agosto, el tipo de cambio muestra un comportamiento volátil y ha oscilado entre $943,78 pesos en 1 de agosto y $933,84 al 19 de agosto. Las razones que explican el aumento que registró durante el mes de julio, tienen relación con la caída que registró el precio del cobre, cuyo valor registró su nivel promedio mensual más bajo desde abril, con un nivel de $4,26 dólares la libra, sin embargo, sigue siendo un valor sobre el promedio de los últimos 5 años ($3,58 dólares la libra) y muy positivo para la actividad minera y los ingresos fiscales futuros. Respecto al petróleo, tanto el WTI como el Brent se mantienen en niveles estables desde el 2023 y no presentan un tendencia ni alcista ni bajista, en este sentido, los precios internos se mantienen acotados en este ámbito.


Víctor Salas Opazo y Equipo (1) Conversatorio de Política Económica

Departamento de Economía, USACH


(1) Profesor Carlos Yévenes y Sebastián Cuéllar Pedreros como coordinador de ayudantes de investigación, y Benjamín Oyarce, como ayudante de investigación.

europapress