​Presidente Boric a 3 años del 18-O: “Ya es tiempo que salgamos de nuestra zona de confort para interpretar lo que pasó”

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Al cumplirse tres años del denominado “estallido social” en nuestro país, el Presidente Gabriel Boric, hizo un llamado a no olvidar las demandas que motivaron las manifestaciones y a no repetir las escenas de violencia que se vivieron en el marco de tal movimiento.

"Hace tres años miles de personas se manifestaron expresando un malestar acumulado por largo tiempo que clamaba por mayor justicia, igualdad y el fin de los abusos”, consignó esta mañana el Mandatario. “Se manifestaron para que ni el tamaño de la billetera ni el lugar de nacimiento fueran condición para acceder a una vida segura, a una salud digna, a una educación de calidad y por la necesidad de contar con pensiones que garanticen jubilaciones dignas tras una vida de esfuerzo“, indicó.

En tal sentido, expresó que “el 18 de octubre debiera desafiarnos a todos y a todas, y en cambio lo hemos usado como una razón para reafirmar lo que ya pensábamos desde antes. A tres años del estallido social ya es tiempo que salgamos de nuestra zona de confort para interpretar lo que pasó, las lecciones que debemos sacar de este proceso y actuar”.

De acuerdo al Presidente, “el estallido no fue una revolución anticapitalista y tampoco, como han querido instalar en los últimos días, una pura ola de delincuencia; fue una expresión de dolores y fracturas de nuestra sociedad que la política, de la cual somos parte, no ha sabido interpretar ni dar respuesta”. Aseveró que “cuando leemos el estallido solo para reafirmar nuestras concepciones estamos eludiendo su mensaje y enseñanza, y como Presidente de Chile no voy a cometer ese error, y estamos trabajando desde nuestro gobierno y las fuerzas políticas que nos apoyan para no caer en lo mismo. Una ruptura de esta magnitud debe desafiar nuestros puntos de vista y empujarnos a mirar lo que no queremos ver”.

A su vez, remarcó que “la protesta social no puede ser sinónimo de violencia, no puede cobijarla ni justificarla, porque va en contra de sus principios y propósitos y en contra de su vocación de mayoría”. La autoridad recordó que la gravedad de los incidentes ocurridos durante tales protestas, "se volvió contra las propias causas del estallido”. Según planteó, “este tipo de violencia no es inocente, causa daño, alienta el odio, genera inseguridad y termina fomentando represiones políticas antidemocráticas que no queremos para Chile”.

europapress