​Aguas Andinas reafirma su plan de inversiones pese al contexto social y sanitario

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Aguas Andina

Este miércoles y por segundo año consecutivo a través de teleconferencia, se llevó a cabo la Junta de Accionistas 2021 de Aguas Andinas, la cual tuvo como uno de sus puntos centrales las inversiones desplegadas durante el ejercicio 2020 así como las programadas para este año y el futuro. A su vez, se trató la actual crisis sanitaria ocasionada por la pandemia del Covid-19 y el complejo escenario de megasequía que enfrenta la Región Metropolitana.

Así, se recalcó la importancia de no detener las inversiones necesarias especialmente para hacer frente al cambio climático, dentro de las cuales se visualizan oportunidades de US$ 500 millones que permitirán, obtener nuevas fuentes de agua e incrementar las horas de autonomía de la ciudad.

En concreto, y con el objetivo de avanzar en el respaldo del suministro, la compañía tiene en carpeta los proyectos Los Pozos de Cerro Negro - Lo Mena, una obra fast track que entrará en operación en 2022 y permitirá llegar a las 37 horas de autonomía, y la conducción El Manzano – Toma Independiente, este último de un total de $ 35.000 millones que ya ha sido validado por la SISS y que consolida la última fase del plan de resiliencia de Aguas Andinas, permitiendo alcanzar como mínimo las 48 horas y hasta 3 meses la autonomía de la ciudad.

De igual forma, se destacaron los proyectos de la ampliación de la Planta Padre Hurtado, que con una inversión total de $ 17 mil millones pasará de los actuales 1.300 litros por segundo a los 2.300 cuando entre en funcionamiento en junio de 2022; el estanque San Enrique, que considera dos nuevos estanques para reforzar el suministro a más de siete mil clientes en Lo Barnechea y que contempla una inversión que llega a los $3.300 millones; y el estanque San Antonio, con el cual se asegurará el suministro a más de 70 mil clientes con un nuevo estanque de 20.000 m3.

Todo lo anterior ha sido posible gracias a la solidez financiera que posee la compañía que, durante 2020, alcanzó una posición de caja 2,4 veces superior a los $ 72.063 millones que mantenía al cierre de diciembre de 2019.

La gerenta general de Aguas Andinas, Marta Colet, destacó que “estamos conscientes del impacto que ha tenido la crisis climática y que hoy no hay espacio para otro llamado que no sea el de la urgencia a actuar. En la compañía, sabemos el importante rol que tenemos, por lo tanto, seguiremos trabajando intensamente para buscar distintas alternativas y continuaremos desplegando todas las inversiones que sean necesarias para que Santiago y sus habitantes cuenten con la seguridad y el respaldo de suministro que se necesita aún en situaciones tan extremas”.

En la instancia también se dio a conocer el intenso plan llevado a cabo durante 2020 para hacer frente a la emergencia sanitaria por Covid-19, el cual permitió mantener la continuidad operacional en todo momento. De forma adicional, se reafirmó el compromiso de continuar dicho trabajo durante este 2021, considerando que aún se mantiene la incertidumbre en cuanto a la pandemia.

El presidente del directorio, Claudio Muñoz, destacó durante la junta que “sin duda lo vivido durante el último año a raíz de la emergencia sanitaria y los efectos del cambio climático, nos ha hecho acelerar ciertos cambios y transformaciones en la compañía. A su vez, queremos avanzar hacia un modelo de empresa más acorde a los tiempos actuales y conectada con la realidad de nuestros colaboradores, clientes y accionistas. Tenemos el conocimiento, la experiencia, estamos aprendiendo cada día y no hay duda de que en la adversidad también nos hemos vuelto cada vez más resilientes. Adicionalmente, tenemos la certeza de que cumplimos a cabalidad nuestro rol de empresa de servicios medioambientales, dando respuesta a las necesidades que el país necesita y aportando a su desarrollo.


Pago de Dividendo

Durante la cita se aprobó también repartir entre los accionistas un dividendo adicional por importe de $65.181 millones, que incluye $26.754 millones como dividendo adicional de 2020 y $38.436 millones con cargo a las utilidades acumuladas. El dividendo total pagado sobre los ejercicios 2019 y 2020, considerando el dividendo provisorio distribuido en diciembre de 2020 por $ 64.800 millones y la distribución aprobada hoy, representa 79% de la utilidad distribuible agregada de ambos ejercicios.

En cuanto a las proyecciones para este año, los accionistas se vieron confiados y seguros que producto de las inversiones ya realizadas y por realizarse, el recurso de agua potable estará asegurado para el Gran Santiago.

europapress