Director ejecutivo de Transformación Digital Corfo: “En Chile no hay industria 4.0”

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Industria 4.0


Considerada como la Cuarta Revolución Industrial, la Industria “4.0” comanda la agenda en materia de productividad a nivel internacional. Sin embargo, nuestro país estaría perdiendo competitividad en este modelo productivo, dejando fuera aspectos relevantes como inteligencia artificial, big data, manufactura aditiva, la interconexión masiva de sistemas, entre otros, y donde dispositivos digitales como sensores, componentes, celulares, tablets, entre otros, que juegan un rol crucial.

En el Informe de Competitividad Global 2018 del Foro Económico Mundial, Alemania lidera el campo de la innovación, sobre todo gracias a la velocidad con la que desarrolla nuevas tecnologías, como, por ejemplo, los automóviles sin conductor. Ningún otro país ha dominado el proceso desde la idea hasta el producto de forma tan práctica.

Muchas empresas alemanas apuestan por la industria 4.0 como palanca para la digitalización de las técnicas de producción y los procesos logísticos. Un papel central en la senda hacia un “país digital” tiene 5G, la próxima generación de telefonía móvil. Hasta 2020, solo en Alemania estarán interconectados en red unos 770 millones de smartphones, tabletas, vehículos, aparatos hogareños y máquinas industriales. Iniciativas como Hidden Champions, Corporate Venturing y Corporate Labs aceleran el proceso de transformación digital que afronta la comunidad empresarial y ayudan a mejorar la productividad.

A partir de este concepto, en Alemania se han creado alianzas estratégicas entre quienes poseen grandes capacidades de innovación: empresas y startups, universidades e institutos de investigación, todos apoyados por instancias gubernamentales y privadas.

El Gobierno Federal destinó 5 billones de euros para fomentar en cinco años la digitalización de la economía y sociedad solo del estado de Baviera, uno de los 16 del país. Es un aporte de capital relevante que están canalizando hacia la creación de startups, la digitalización del gobierno, la innovación y la infraestructura digital, y adelantos en la educación, en todos los niveles escolares.

Sin embargo, nuestro país está avanzando mucho más lento que Alemania y así lo indica Juan Francisco García, director del Comité de Transformación Digital, donde funciona el Programa de Manufactura Avanzada. “Contrastando con esa realidad está Chile con solo 200 empresas con manufacturas avanzadas, pero sin una industria 4.0 propiamente tal”.

El especialista subraya que se debe avanzar desde la manufactura tradicional a una manufactura avanzada, con el uso de tecnologías digitales y nuevos modelos de negocio, que generen un impacto positivo en la productividad, calidad de los productos y servicios y a la vez instalen capacidades tecnológicas en Chile para capturar nuevas oportunidades de negocio basados en procesos manufactureros modernos, flexibles y escalables.

La cifra de 200 empresas se desprende de un estudio econométrico del CTD de CORFO que utilizó datos de la última Encuesta Nacional Industrial Anual (ENIA) junto a otros antecedentes del sector. El estudio estima que en Chile hay sectores con potencial de trabajo en industrias avanzadas como la minería, construcción sustentable, energía, acuicultura y alimentos, áreas en las cuales tenemos ventajas competitivas para desarrollar soluciones de mayor valor agregado.

“En el caso de la uva fresca, somos el principal proveedor mundial, dado esto, Chile está al menos en el top ten a nivel mundial en empresas del rubro, de forma tal que, si los proveedores de esta industria son capaces de mejorar la productividad de la industria chilena de la fruta fresca, podrían hacer lo mismo con empresas internacionales y todo esto a través de soluciones de manufactura avanzada”, sostiene García.

La principal brecha que ve el encargado del CTD de CORFO para avanzar hacia la Industria 4.0 está en el desconocimiento de las oportunidades de esta nueva industria, y, también, en el escaso capital humano disponible en temas de gestión como operacionales.

“A diferencia de lo que ocurre con otras revoluciones, esta es silenciosa. Entonces hay muchas empresas que no se han dado cuenta que están inmersas en un proceso de cambio profundo”, alerta el miembro del CTD de Corfo.

Por lo mismo, resalta acciones como la de CAMCHAL, Cámara Chileno Alemana de Comercio e Industria, que en agosto realizará el primer seminario práctico de Industria 4.0 en Chile. Este programa permite a los asistentes tener una aproximación práctica en un laboratorio físico de Industria 4.0, donde se harán simulaciones y aplicaciones de las tecnologías para digitalizar procesos de producción industrial a escala. El objetivo es generar habilidades para participar en el desarrollo estratégico comprendiendo el entorno operativo hacia la digitalización de la Industria; desde la concepción, implementación, la selección de métodos y tecnologías para modernizar procesos industriales.

Según García, iniciativas como estas permiten fortalecer la visión de los empresarios respecto de la importancia de avanzar hacia una industria moderna, que permita desarrollar una industria exportadora de soluciones empresas-a-empresa (B2B) y que emplee capital humano calificado, aumentando su contribución al PIB nacional.

“La idea es ayudar a las empresas que están en la industria 1.0, en 2.0 o en la 3.0 a ir escalando posiciones para que puedan ir desarrollando nuevos servicios y así mejorar sus propuestas de valor”, sentencia el experto.

europapress