El país observa su peor desempeño en casi una década, lastrada por una caída del 30% en el valor de la lira debido a las preocupaciones en torno a una disputa diplomática con EE.UU. y la independencia del banco central ante la presión del Presidente Erdogan para reducir los costos de los préstamos.
Las relaciones entre los dos aliados de la OTAN han sido tensas por el apoyo de EEUU a la milicia kurda YPG, vista por Turquía como una extensión del PKK, el Partido de los Trabajadores de Kurdistán, que lleva décadas de insurgencia en suelo turco, informa este lunes la agencia internacional de noticias Reuters.
La nueva previsión para este año coincide con los pronósticos de la agencia de calificación de riesgo Fitch, que rebajó la nota crediticia del país debido a los crecientes riesgos económicos.
La institución que puso todas sus cartas encima de la mesa ayer fue el Banco Central de Turquía (CBRT), que sorprendió a los mercados al subir los tipos 625 puntos básicos (desde el 17,75% hasta el 24%), duplicando las expectativas de los analistas y en contra de los deseos del presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, que solicitaba una bajada de tipos.
La institución monetaria ha elevado los intereses 625 puntos básicos para luchar contra la devaluación de la lira y la elevada inflación.
La entidad monetaria turca intenta contener la crisis cambiaria e inflacionaria que azota al país. Durante esta mañana, la lira turca se dispaba en más de un 5% respecto del dólar.
El Banco Central de Turquía ya reaccionó a la noticia, al reconocer que los últimos datos de inflación apuntan a "riesgos sustanciales" y se declaró dispuesto a utilizar todos los instrumentos disponibles para realizar los ajustes necesarios y preservar la estabilidad de los precios.
La instancia también revisó los resultados de una evaluación internacional sobre infraestructuras del mercado financiero, en la que Chile experimentó mejoras relevantes.
La divisa turca ha perdido casi un 40% de su valor frente al dólar este año, afectada por la disputa diplomática y la alarma de los inversores sobre la influencia del presidente Tayyip Erdogan en la política monetaria
Ayer, el gobierno turco anunció una serie de medidas para intentar estimular el hundimiento de la lira en un contexto de desconfianza de los mercados hacia el presidente Erdogan, que denuncia un «complot».
El banco central de Turquía ha indicado que aportará toda la liquidez que necesiten los bancos, y ha añadido que tomará «todas las medidas necesarias» para asegurar la estabilidad financiera.
El dólar cerró la sesión de este viernes con un incremento de $7,40 impulsado por la baja en el precio del cobre y la fortaleza de la divisa como consecuencia de la crisis comercial EEUU-Turquía.
Las turbulencias de los mercados emergentes estarán en el centro de la atención de los inversionistas en los próximos días, ya que les preocupa una propagación del desplome del valor de las monedas de Turquía y Rusia hacia otras economías, convirtiéndose en un nuevo factor de riesgo para la expansión económica global.
BBVA cae 5,5% en bolsa este viernes y arrastra al resto de bancos españoles en otra jornada marcada por la crisis de la lira turca.
La divisa turca ha experimentado este viernes un repliegue superior al 10% frente al dólar en una jornada marcada por la compleja encrucijada diplomática y comercial del gobierno turco con el de Washington, y una difícil situación monetaria y económica doméstica. El Presidente Erdogan, por lo pronto, pidió a sus compatriotas cambiar sus divisas extranjeras para sostener el billete local.
“¡Nuestras relaciones con Turquía no son buenas en este momento!”, aseveró el Mandatario norteamericano. Su homólogo turco, Tayyip Erdogan, pidió a sus compatriotas intercambiar oro y divisas por liras, en un intento por defender su moneda frente al dólar.