Un planeta de apenas 5 millones de años, probablemente un gigante gaseoso de tamaño similar a Júpiter, ha sido descubierto de forma inesperada alrededor de un joven análoso de nuestro Sol.
El hallazgo, publicado en Astrophysical Journal Letters, se realizó utilizando uno de los observatorios más avanzados del mundo: el Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral (VLT de ESO), en el desierto de Atacama, Chile. El nuevo planeta ha sido bautizado como WISPIT 2b.
El Dr. Christian Ginski, profesor de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad de Galway y segundo autor del estudio, afirmó en un comunicado: "Utilizamos breves observaciones instantáneas de muchas estrellas jóvenes (solo unos minutos por objeto) para determinar si podíamos ver un pequeño punto de luz junto a ellas, causado por un planeta. Sin embargo, en el caso de esta estrella, detectamos un disco de polvo multianillo completamente inesperado y excepcionalmente bello.
Cuando vimos este disco multianillo por primera vez, supimos que teníamos que intentar detectar un planeta en su interior, así que solicitamos rápidamente observaciones de seguimiento".
Es solo la segunda vez que se detecta un planeta confirmado en esta etapa evolutiva temprana alrededor de una versión joven de nuestro Sol. El primero fue descubierto en 2018 por un equipo de investigación en el que también participó el Dr. Ginski.
WISPIT 2b es también la primera detección inequívoca de un planeta en un disco multianillo, lo que lo convierte en el laboratorio ideal para estudiar la interacción planeta-disco y su posterior evolución.
El planeta fue capturado en luz infrarroja cercana (el tipo de imagen que se obtendría con gafas de visión nocturna), ya que aún brilla y está caliente tras su fase inicial de formación.
El equipo de la Universidad de Leiden y la Universidad de Galway capturó una imagen espectacularmente nítida del joven protoplaneta incrustado en un hueco de disco. También confirmaron que el planeta orbita su estrella anfitriona.
El planeta también fue detectado en luz visible por un equipo de la Universidad de Arizona utilizando un instrumento especialmente diseñado. Esta detección a una longitud de onda o color de luz específico indica que el planeta aún está acrecentando gas activamente mientras forma su atmósfera.
WISPIT 2b se detectó como parte de un proyecto de investigación observacional de cinco años, durante el cual el equipo internacional buscó determinar si los planetas gigantes gaseosos de órbita ancha son más comunes alrededor de estrellas jóvenes o viejas. Esto condujo al inesperado descubrimiento del nuevo planeta.
Los discos ricos en polvo y gas alrededor de estrellas jóvenes son las cunas del nacimiento de los planetas. El disco alrededor de WISPIT 2b tiene un radio de 380 unidades astronómicas, aproximadamente 380 veces la distancia entre la Tierra y el Sol.
El Dr. Ginski añadió: "Capturar una imagen de estos planetas en formación ha resultado ser un gran reto y nos brinda una oportunidad real de comprender por qué los miles de sistemas de exoplanetas más antiguos que existen se ven tan diversos y diferentes de nuestro propio sistema solar. Creo que muchos de nuestros colegas que estudian la formación planetaria estudiarán detenidamente este sistema en los próximos años".