​Las tres opciones que barajó el Banco Central en su última RPM

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Banco Central 4

De acuerdo a la minuta de la Reunión de Política Monetaria (RPM) celebrada el 14 de diciembre pasado, , el Consejo concordó en que la política monetaria debía completar el retiro de todo el impulso adoptado durante la crisis y abrir el camino hacia una posición restrictiva, de modo de asegurar la convergencia de la inflación a la meta en el horizonte de política de dos años.

Para esta Reunión, la instancia consideró tres opciones: aumentar la TPM en 100 puntos base (pb); aumentarla en 125pb; y aumentarla en 150pb. “Todos los Consejeros estuvieron de acuerdo en que, dada la evolución del escenario macroeconómico y sus riesgos, era necesario que la TPM se moviera hacia un nivel restrictivo, tal como lo mostraba el corredor de tasa del IPoM de diciembre”, consigna la minuta. Según ese corredor, acota, “para asegurar la convergencia de la inflación a la meta dentro del horizonte de política, en los próximos meses la TPM debía ubicarse entre 275 y 325pb por sobre el nivel previo a esta Reunión (2,75%). Por esto, la decisión de esta Reunión tenía componentes tácticos y comunicacionales importantes. En particular, porque, independiente de la opción que se eligiera, la TPM debería seguir aumentando en los próximos meses y el incremento que se determinara en esta ocasión podía marcar el ritmo futuro de aumentos.”

Tal como se indica, “hubo coincidencia en el Consejo en que la opción de aumentar la TPM en 100pb era la que ofrecía menores ventajas. A juicio de un Consejero, esta alternativa había ido quedando rezagada respecto de lo que esperaban los mercados, y se corrían al menos dos riesgos. Primero, requerir acelerar las alzas en Reuniones venideras, generando algún grado de confusión. Segundo, inducir a que se pensara que el Banco tenía un excesivo relajo respecto del cumplimiento de la meta de inflación.”

Varios Consejeros valoraron la opción de aumentar la TPM en 150pb. A su juicio, ayudaba a marcar un paso más decidido para llegar a los niveles de tasa que esperaba alcanzar en los próximos meses, lo que podía ayudar a prevenir los impactos que la elevada inflación estaba teniendo en las expectativas. Todos los Consejeros coincidieron en que el principal riesgo de esta opción era volver a sorprender al mercado, en circunstancias que las últimas dos decisiones ya habían sido sorpresivas. Sobre esto, un Consejero agregó que, si bien un alza de esta magnitud sorprendería a parte del mercado, ello podría explicarse porque aún quedaba un largo camino por recorrer, se partía de una situación en que la economía estaba creciendo muy por sobre su capacidad, los niveles de tasas nominales eran significativamente menores que la inflación esperada para los próximos trimestres, y las expectativas de inflación estaban por encima de la meta. Este mismo Consejero añadió que, sin embargo, al mismo tiempo se corría el riesgo que fuera percibida como el reflejo de una situación más grave de lo que anticipaba el escenario central del IPoM, pudiendo generarse alzas en toda la curva de tasas que fueran más allá de lo deseable.

Respecto de la opción de aumentar la TPM en 125pb, todos los Consejeros coincidieron en que era la alternativa que mejor reflejaba el contenido del IPoM y el juicio del Consejo. En particular, ubicaría la TPM algo por encima de la mediana de las expectativas, pero dentro del corredor de tasa, lo que le daría plena credibilidad al diagnóstico y proyecciones del IPoM y, al mismo tiempo, reafirmaría la decisión del Consejo de dar los pasos necesarios para asegurar el cumplimiento de la meta de inflación.

En definitiva, el presidente del Central, Mario Marcel, el vicepresidente, Joaquín Vial y los Consejeros Pablo García, Alberto Naudon y Rosanna Costa, votaron por aumentar la TPM en 125pb, hasta 4%.

europapress