MADRID 14 Oct. (EUROPA PRESS) - Al menos tres agentes de las fuerzas de seguridad de Italia han muerto este martes a causa de una explosión y posterior derrumbe durante una operación de desalojo en la localidad de Castel D'Azzano, situada en los alrededores de Verona (norte), según han confirmado las autoridades.
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha mostrado su "profundo pesar" por la "trágica muerte" de tres agentes de Carabineros a causa de la explosión, que ha dejado además trece heridos entre "militares, bomberos y policías", tal y como ha explicado en un mensaje en su cuenta en la red social X.
Así, ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas y ha deseado una "pronta recuperación" a los heridos. "Sigo con preocupación y dolor el desarrollo de estos acontecimientos, que nos recuerdan el valor y el sacrificio cotidiano de quienes sirven a Italia y a sus ciudadanos", ha remachado.
En esta línea, el ministro de Defensa italiano, Guido Crosetto, ha resaltado que se trata de "un día de dolor, tristeza y luto" y ha honrado la memoria de los muertos, "que han sacrificado su propia vida cumpliendo hasta el final su deber al servicio de Italia".
El fiscal de Verona, Raffaele Tito, ha indicado en declaraciones a la agencia italiana de noticias AdnKronos que el lugar es "una escena apocalíptica" tras la explosión, tras la que los tres residentes en la vivienda, uno de los cuales ya habría amenazado con prenderse fuego durante un intento de desalojo en 2004, han sido detenidos.