Ibiza acoge hoy y mañana las XXVIII Jornadas de Avances en Insuficiencia Cardiaca y Miocardiopatías en el Palacio de Congresos del Hotel Torre del Mar. En ellas se abordarán los últimos avances en insuficiencia cardiaca, miocardiopatías y cardiología clínica.
El objetivo de estas jornadas es "reunir a médicos de distintos ámbitos de la salud para debatir sobre los avances que están cambiando la forma de tratar las enfermedades cardiovasculares", señala el doctor Tomás Ripoll, jefe de Servicio de Cardiología del Hospital Universitario Son Llatzer y presidente del comité organizador de las jornadas.
Según este experto, la insuficiencia cardiaca y las miocardiopatías son enfermedades con un gran impacto social y sanitario. "La insuficiencia cardiaca es una de las principales causas de ingresos hospitalarios en personas mayores y una de las que más afecta a su calidad de vida", asegura el doctor Ripoll.
En el caso de las miocardiopatías, se trata de enfermedades del músculo cardiaco que hacen que se vuelva más grande y más rígido o que sus paredes engrosen. "Los pacientes pueden notar dificultad para respirar, dolor en el pecho, hinchazón en las piernas o palpitaciones", continua el cardiólogo.
Se estima que en España una de cada 400 personas puede padecer una miocardiopatía, siendo la más frecuente la miocardiopatía hipertrófica. "Son patologías que, sin un buen control, pueden derivar en insuficiencia cardiaca o en complicaciones graves e incluso la muerte", asevera el doctor Ripoll.
En muchas cardiopatías existe un componente genético, según este experto, por lo que es fundamental estudiar también a los familiares de los pacientes afectados. No obstante, el doctor Ripoll apunta al consumo de alcohol o drogas, fármacos oncológicos e infecciones virales, como posibles factores desencadenantes.
Por ello, considera fundamental mantener buenos hábitos de vida, controlar la presión arterial y hacer ejercicio moderado de forma regular. "La buena noticia es que la llegada de fármacos como mavacamten ha mejorado de forma espectacular la calidad de vida de los pacientes", añade el jefe de Cardiología del Hospital Son Llatzer.
Además, las técnicas de imagen como el ecocardiograma y la resonancia magnética permiten detectar una miocardiopatía antes de que cause síntomas, mientras que el análisis genético ayuda a identificar mutaciones que explican la enfermedad y estudiar a los familiares en riesgo. "Cuanto antes se diagnostique, antes podemos actuar y prevenir complicaciones graves", concluye el doctor Ripoll.