El Tribunal General de la UE --en primera instancia del TJUE-- ha anulado este miércoles la decisión de la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía de la Unión Europea (ACER) sobre la gestión de los mercados eléctricos porque carecía de competencia para introducir requisitos adicionales a los cálculos de capacidad.
El asunto se remonta a 2015, cuando la Comisión Europea aprobó un reglamento para fijar metodologías comunes de cálculo de capacidad diaria en las regiones eléctricas de la UE.
Acto seguido, en 2019, la ACER adoptó una decisión sobre estas metodologías, pero la autoridad alemana BNetzA la recurrió y en 2022, el Tribunal General anuló esa decisión.
Sin embargo, en 2023, la Sala de Recurso de la ACER la confirmó de nuevo, lo que llevó a Alemania y a la BNetzA a impugnarla una segunda vez, alegando que la ACER no podía imponer criterios adicionales (como un análisis de eficiencia económica) para determinar qué elementos internos de la red debían considerarse 'críticos' en el cálculo de capacidad.
Ahora, en su sentencia dictada este miércoles, el Tribunal General ha vuelto a anular la decisión de la ACER, ya que considera que carecía de competencias para imponer condiciones y requisitos adicionales más allá de lo previsto en la normativa europea.
Además, el fallo señala que el criterio de eficiencia económica no es jurídicamente vinculante para los Estados miembro ni para los operadores del mercado eléctrico.