El grupo francés de infraestructuras y transportes Alstom registró una facturación de 4.514 millones de euros durante su primer trimestre fiscal, finalizado en junio, lo que equivale a una subida del 2,8% en términos absolutos y del 7,2% en métricas orgánicas respecto a lo contabilizado en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Las ventas de la división de material rodante fueron de 2.416 millones de euros, un 3,3% más, mientras que la rama de servicios generó 3.257 millones de euros, un 0,3% menos. De su lado, la unidad de señalización brindó 603 millones de euros y la de sistemas 425 millones de euros, un 5,3% menos y un 24,6% más, respectivamente.
Por áreas geográficas, Europa acaparó el grueso de las ventas con 2.672 millones de euros, seguida de América con 833 millones de euros. Los ingresos en Asia-Pacífico se situaron en 652 millones de euros y los de Oriente Medio y África en 357 millones de euros.
Alstom recibió nuevos pedidos por valor de 4.075 millones de euros durante el trimestre, un 11,8% más en comparativa absoluta y un 13,6% en orgánica. La cartera de encargos pendientes de entrega fue de 92.300 millones de euros.
"Los pedidos del primer trimestre han superado los 4.000 millones de euros con unas perspectivas muy positivas para el segundo trimestre gracias a América del Norte. Todas las líneas de negocio han contribuido al crecimiento orgánico de las ventas, especialmente por los proyectos en Alemania, que están empezando a despegar", ha explicado el consejero delegado de Alstom, Henri Poupart-Lafarge.
El directivo ha confirmado previsiones para el ejercicio fiscal 2025, para cuando se anticipa que el crecimiento de las ventas orgánicas esté entre el 3% y el 5% y que el 'cash flow' se quede entre los 200 a 400 millones de euros.