Cuenta Presidencial 2024
La Cuenta Presidencial 2024 evidenció la preocupación del Presidente por la seguridad y el crecimiento económico, delineando la estrategia a seguir en materia tributaria, la cual seguirá el estilo de acuerdos logrados en materia de seguridad que ha “mostrado los frutos”.
“Hagamos lo mismo para destrabar el crecimiento. Busquemos concordar los ajustes que nos permitan mejorar ahora, no en 10 o 20 años, mejorar las pensiones de nuestros jubilados, así como las modificaciones de orden tributario que aseguren a la vez inversión y responsabilidad fiscal”.
Además de lo anterior, dos veces se refirió al Estallido Social de octubre de 2019 vaticinando una nueva versión pues las demandas ahí ventiladas “siguen tan vivas y vigentes como antes”.
El horizonte que el primer mandatario esboza es de lo más complicado, pues señala la necesidad de lograr soluciones a los problemas sociales a través de la reforma tributaria del impuesto a la renta que, según se anunció, próximamente se enviará al Congreso, para evitar revivir los traumáticos eventos sociales ya vivido, lo cual tiene una relación de “causa-efecto” que obliga a dar soluciones rápidas a temas complejos.
Sin duda que los problemas de pensiones y casi nulo crecimiento, son temas que solo es posible solucionar con respuestas técnicas basadas en la evidencia empírica y no en modelos teóricos que consideran elementos ajenos a nuestra realidad. Por otro lado, el tema de pensiones requiere soluciones inmediatas que obligan a contar con recursos de forma inmediata.
Este escenario nos obliga a discutir soluciones de corto, mediano y largo plazo.
Es importante entender que el tema de mejorar las pensiones a los jubilados actuales, es algo imperioso y que obliga a discutir cómo aumentar la recaudación fiscal para estos motivos, siendo plausible considerar un impuesto al trabajo adicional cuya cuantía y administración debe ser técnicamente debatida. Pero los problemas sociales de salud y educación, que también tienen una dimensión de corto plazo, pueden ser solucionadas a través de estrategias estructurales.
Son varias las estrategias que deben ser debatidas en los próximos meses, y no concentrarse solo en la mágica solución del aumento impuestos a la renta o al patrimonio, pues tal como señaló el diputado Miguel Mellado, el gobierno tiene un “tremendo presupuesto” que debe gestionar eficientemente.
La evidencia empírica me permite afirmar que no se logra mayor recaudación con el aumento de impuestos a los tratos altos de ingresos, así tampoco como aumentar la base de los tramos inferiores de los impuestos personales, para que más contribuyentes “se sientan comprometidos” con su aporte al financiamiento fiscal, pues existen mecanismos eficientes que permiten facilitar el acceso a seguros de salud o una mejor educación, en vez de entregar sus pequeños “aportes” al Fisco para que éste los asigne a todo el gasto social predefinido.
Mi propuesta puede parecer contradictoria, pero tiene sustento empírico y técnico que debe ser debatido, argumentando posturas objetivas y no inspiradas en doctrinas ya fracasadas. Creo que es necesario aprovechar el espíritu transmitido por el Presidente en su Cuenta Pública, para comenzar con este ejercicio republicano.
Prof. Germán R. Pinto Perry,
Director Programas de Especialización Tributaria,
Centro de Investigación y Estudios NRC,
Universidad de Santiago
