​Cómo aporta la tecnología en la fuga de talentos de las empresas

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Alfonso Bawarsky

Entre todas las cosas que nos dejó la pandemia, existe una tendencia que creció explosivamente en el ámbito laboral. Me refiero al fenómeno conocido como la Gran Renuncia, donde trabajadores de todo tipo de empresas renunciaron de forma masiva, inspirados por la búsqueda de nuevas oportunidades, lograr un balance entre trabajo y vida personal, mudarse de las grandes ciudades a zonas más retiradas, y/o preferir ocupaciones que les permitieran desempeñarse a distancia. Incluso algunos decidieron abandonar por completo el mundo laboral.

Según la Sociedad para la Gestión de Recursos Humanos en Estados Unidos, 47 millones de personas renunciaron a sus puestos en 2021 sólo en ese país. Desde el punto de vista de las empresas, esto significó una fuerte fuga de talentos que impactó en el funcionamiento de organizaciones de todos los tamaños e industrias. Para abordarlo, cada una de ellas delineó estrategias y puso en práctica medidas destinadas a retener a sus equipos, con cambios y mejoras en la experiencia de los trabajadores.

Sin duda que cada una de estas herramientas ha sido de utilidad para las empresas y valoro la preocupación y el interés por los trabajadores. Pero al mismo tiempo, me gustaría agregar una visión tecnológica a este desafío, especialmente si consideramos que la mayoría de las acciones han provenido de las áreas de Recursos Humanos y Gestión de Personas.

La tecnología está cada vez más presente en todas las áreas de la compañía, y también puede ser un aporte real en la Gestión de Personas. Por sí misma no es capaz de resolver el problema, pero si se complementa una visión humana con el uso de soluciones digitales, es posible ayudar a las empresas a revertir positivamente la crisis de talento.

Por ejemplo, ante la alta rotación de personal, las plataformas alojadas en la nube permiten disminuir los costos mediante herramientas en línea que minimizan los tiempos de contratación, al optimizar la conexión entre ofertas y talentos profesionales disponibles. También prestan apoyo en la administración interna, con tareas que pueden ir desde la emisión automática de contratos, alertas automatizadas entre áreas, gestión de beneficios, permisos y bonos para los trabajadores, etc.

En cuanto a la productividad, la tecnología en la nube potencia el rol de las personas y se adapta a las necesidades de aquellos que optaron por el formato híbrido o el teletrabajo a tiempo completo. Programas como la Infraestructura de escritorio virtual (VDI) o la tecnología Desktop as a Service (DaaS), entregan a los colaboradores acceso remoto a las aplicaciones de la compañía y los datos que necesitan para realizar sus funciones desde cualquier lugar.

En un nivel estratégico, cuando las empresas cuentan con mayores herramientas tecnológicas dentro de sus operaciones, optimizan los recursos internos y así pueden poner el foco en tareas fundamentales para la retención de sus equipos y el crecimiento del negocio. Las razones para migrar a la nube son muchas, fluidez, productividad, ahorro de costos, flexibilidad y avance en la transformación digital. Pero lo más importante y lo que nunca debemos perder de vista, es que la tecnología permite entregar mayor bienestar a los trabajadores y en esta ecuación, todos resultamos beneficiados. 


Alfonso Bawarshi, 

CEO y Socio Fundador de Grupo Avanza

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