¿Ampliar la base de los impuestos a las personas?

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German Pinto (4)

El proyecto de ley de reforma tributaria que está siendo tramitado en el Congreso tiene el gran objetivo de incrementar en 12 mil millones de dólares la recaudación fiscal, cifra necesaria para financiar las promesas de campaña y las necesidades sociales que se han demandado vehementemente desde octubre de 2019, aunque se ha estimado en 41 mil millones de dólares las sumas necesarias para financiar el nuevo Chile que surgiría de la propuesta de constitución que votaremos el próximo 4 de septiembre. Independientemente una u otra cifra, esta reforma necesita aumentar muchísimo la recaudación fiscal.


Para lograr tal encomiable propósito, la autoridad fiscal analizó muchas propuestas recogidas a través de los Diálogos Sociales que realizó en el primer semestre, aceptando, modificando, postergando y desechando algunas ideas, como la propuesta de aumentar la base tributaria de los impuestos que afectan a las personas naturales, dado que, hasta ahora, poco más de 7,2 millones de personas no pagan el Impuesto Global Complementario ni el Impuesto Único al Trabajo (IUT).


Esta estrategia es sugerida por la OCDE y no deja de ser interesante de analizar.


Concentrémonos en el IUT que es el que afecta a las remuneraciones mensuales. De acuerdo con cifras del Servicio de Impuestos Internos al 2020, 6.059.871 personas son los contribuyentes que están en el tramo exento de este tributo (ganan menos de 13,5 UTM), es decir, mensualmente no reciben más de $ 793.422 (monto a agosto de este año).


Si afectamos a todos ellos con una tasa efectiva del 3% tendríamos que mensualmente pagarían $ 23.803 por concepto de IUT, que multiplicado por los 6 millones nos arrojaría una suma de $ 144.243.109.413 (aproximadamente 151 millones de dólares) en forma mensual. 


Si anualizamos la suma anterior, tendremos un ingreso anual de $ 1.730.917.312.956 (US$ 1.822 millones de dólares), monto nada despreciable.


Ahora bien, como esta recaudación fresca debe ser destinada a solventar las necesidades sociales, debemos entender que el 70% de todo lo recaudado se destina a vivienda, previsión, salud y educación, motivo por el cual, solo $ 1.211.642.119.069 sería la suma total que podría ser destinada para tales objetivos.


Así de simple, suena bastante lucrativo y eficiente pedir a los 6 millones de trabajadores que ahora no tributan, que restrinjan sus ingresos en 23 mil pesos para que puedan disfrutar de los futuros beneficios sociales que el Estado ha promedito otorgar. 


Pero dando otra miranda, podemos colegir que esos contribuyentes verán mermados sus ingresos en esa cantidad.


Podemos convenir que ganar 700 mil pesos mensuales, no es una fortuna y están en esta situación muchas personas que gastan todo lo que reciben, así también, que gastan más de lo que reciben, gracias al crédito fácil que otorgan las tarjetas de casas comerciales.


Solo un tipo de contribuyente entre 18 y 25 años que pudiera estar en este grupo, que viva con sus padres (ahorrándose gastos de alimentación y vivienda) podrían tener una propensión marginal al ahorro que permitiera amortizar esa rémora en su liquidez. 


Otro aspecto importante para considerar es que a este grupo de la población sería el principal beneficiado de las políticas sociales financiadas con el incremento fiscal obtenido. En otras palabras, ellas mismas financiarían los beneficios sociales que recibirían.


Un tercer elemento de análisis es que la suma que obtuve es el máximo hipotético e imposible de lograr, porque calculé esa suma considerando el total de contribuyentes, es decir, los 6 millones, en circunstancia que aumentar la base, no incluirá a todos ellos, sino a un sector pequeño. Es por lo que resulta imposible de lograr la cifra antes indicada.


Finalmente, debemos reflexionar en la potencia recaudatoria de esta no “políticamente correcta” medida, en relación con otros tributos que, si bien son regresivos, sí tienen un potente efecto recaudatorio como es el IVA.


En efecto, el año pasado, el otrora Director del Servicio de Impuestos Internos informó que gracias a la afectación con IVA de las operaciones digitales como Netflix, Amazon, Google, Uber y otras, fue posible recaudar en los 10 primeros meses de su aplicación la suma de $ 153.093.536.527 (200 millones de dólares), como también en el 2021, cuando a mayo de ese año el IVA recaudó 21.660.000 millones de pesos (28.500 mil millones de dólares) dado el incremento en la actividad económica luego del primer año del COVID, evidenciando algo muy dramático como es que este impuesto, pese a ser totalmente regresivo, es el que más aporta a las arcas fiscales, evidenciando que, si el país tiene potencial de compra y dinamismo en el comercio, se genera más recaudación que concentrarse en la renta de las personas.


Es por lo anterior que considero que aumentar la base, haciendo tributar con impuestos a contribuyentes que hoy no tributan, resulta una mala estrategia, no por lo impopular, sino por lo ineficiente que podría resultar.


Prof. Germán R.Pinto Perry

Director Magíster en Planificación y Gestión Tributaria

Centro de Investigación y Estudios Tributarios


Universidad de Santiago


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