Hermógenes Pérez de Arce



Hermógenes Pérez de Arce

Soluciones de verdad, como las que sirvieron para trasladar a Chile del vagón de cola de los subdesarrollados al primer lugar de América Latina (que acabamos de perder, sintomáticamente, hace un par de semanas). No derivaron de acuerdos ni consensos, sino que provocaron controversia. Pero cambiaron al país.

El hombre normal hoy en Chile es presumido culpable aunque pruebe su inocencia. Si es abordado por ellas, levante los brazos, cierre los ojos, diga a todo que sí y piense en Chile.

¿Qué ha sucedido en Chile para que hoy se sancione con la destitución a un funcionario que se limita a exponer –como corresponde a un museo— una frase y una figura históricas?

Sólo un gobierno de extrema izquierda podría ordenar la destitución del director del Museo Histórico Nacional por exhibir una frase del ex Presidente Pinochet según la cual la derrota del marxismo el 11 de septiembre de 1973 fue un hito en la lucha por la libertad. 

Una ley de la política dice que, en un mundo de opinión dominado por la izquierda, uno no debe ser sorprendido diciendo la verdad, so pena de ser crucificado.

El 11 de septiembre de 1973 se inició un proceso revolucionario que no sólo tuvo obvia trascendencia interna, sino que internacionalmente alcanzó un significado parecido al que, en sus respectivos tiempos, tuvieron la Revolución Francesa y la Revolución Rusa.

Nuestra extrema izquierda no será la mejor del mundo, pero seguro que es la más cara.

En ambos casos es malo regalarlo, porque así se asigna mal lo recursos: se genera exceso de demanda y escasez de oferta. Eso da lugar al descontento. Lo veremos pronto.

Es que las garantías individuales que establece el art. 19 de la Constitución son “derechos sociales”, es decir, todos los habitantes tienen acceso a ellos y nadie puede privarlos de los mismos sin violar la Constitución. Ahora falta que se declare inconstitucional, porque lo es, la Ley de Educación Superior en cuanto prohíbe el lucro en las universidades.

Universidades privadas: interpongan el recurso de inconstitucionalidad contra el “no al lucro” y les debería ir bien.