OPPO Reno 11F 5G es un móvil con diseño único e implacable en la carga rápida en entornos con temperaturas extremas

|

Pruebas del nuevo OPPO Reno11 F 5G en Mont Blanc


OPPO Reno 11F 5G llegó a España este lunes, 8 de abril, equipado con una llamativa cubierta trasera con forma de ondas logrado gracias al proceso OPPO Glow, una batería apta para los más exigentes y una tolerancia a temperaturas extremas de 20 grados bajo cero.



La compañía anunció este dispositivo a finales del pasado mes, cuando comentó que se trataba de un dispositivo elaborado con un "diseño fino y ligero cargado de personalidad", en palabras del presidente de ventas y servicios de OPPO, Billy Zhang.



El directivo se refería al formato de su carcasa, que muestra ondas azules que se mueven en base a cómo incida sobre ella la luz, creando el efecto de las olas del mar con el acabado Magnetic Particle Design, y que hace que cada uno de los móviles ofrezca un aspecto único.



Con este modelo en color azul (Ocean Blue) -aunque también se puede comprar el OPPO Reno 11F 5G en verde oscuro (Palm Green)- hemos viajado a los Alpes franceses y, más concretamente, al Mont Blanc, el macizo más alto de esta cordillera.



Previa a esta excursión, el jefe de producto de OPPO, Arne Herkelmann, ha insistido en que, además de destacar por su apariencia, resultado del proceso de diseño OPPO Glow -en el que se graban a nivel microscópico cristales diminutos para lograr un acabado brillante-, el terminal también lo hace por su resistencia a temperaturas extremas.



En concreto, a menos -20ºC y a 55ºC, donde ofrece el mismo rendimiento que si se estuviera utilizando en condiciones normales, además de que carga al mismo ritmo gracias a que incorpora la tecnología SuperVOOC de 67W, gracias a la cual se alcanza el 30 por ciento de la batería de 5.000mAh en 10 minutos. Para cargarlo por completo, es necesario enchufarlo durante 48 minutos.



Eso lo hemos podido comprobar durante la expedición por la nieve, donde también lo hemos "maltratado" y sometido a caídas desde una altura de medio metro para comprobar su resistencia y cómo se comporta ante la nieve, debido a que dispone de una certificación IP65. Esta también garantiza la protección del dispositivo ante chaparrones en días de lluvia.



Lamentablemente, el cargador no viene incluido en la caja -solo se vende con un cable USB a USB-C-, por lo que el adaptador se debe comprar aparte, por 39 euros según marca la tienda oficial de la firma.



Ese quizá sea uno de los pocos inconvenientes del dispositivo -aunque esto sigue siendo lo más habitual en el ámbito de telefonía móvil-, ya que, a nivel de usabilidad, cumple con lo esperado en este tipo de 'smartphones'.



El último lanzamiento de la firma china tiene un diseño muy fino: 7,54 mm de grosor y 177 gramos de peso, frente a los 7,80 mm de grosor y 183 gramos del Honor 90 o los 7,97 mm y 188,5 gramos del Redmi Note 13, por poner algunos ejemplos dentro de su categoría.



En cuanto a su pantalla, AMOLED de 6,7 pulgadas, ofrece un brillo máximo de 1.100 nits para unas imágenes nítidas. Este, no obstante, se queda algo justo mientras se utiliza en entornos muy iluminados o en exteriores con mucho sol.



Asimismo, el panel proporciona al usuario una tasa de refresco de 120Hz por defecto -la máxima es de 240Hz-, viene con certificación HDR10+ para ofrecer 1,07 millones de colores e integra el sensor de huellas dactilares, que responde con bastante agilidad a la hora de desbloquearlo.



MÓDULO DE CÁMARAS CON SUNSHINE RING


La cámara es otro de los apartados más interesantes de este dispositivo, que introduce un módulo relativamente plano, que no sobresale en exceso. Gracias a este diseño, se puede utilizar el móvil sin carcasa porque no baila cuando se coloca en una superficie recta, algo cada vez menos habitual, ya que se han impuesto los 'smartphones' que exigen una funda para mejorar su estabilidad en estos casos.



Este apartado también resulta interesante por Sunshine Ring, que rodea las lentes y refleja la luz. Las cámaras, por su parte, están distribuidas en dos círculos, siendo el primero de ellos el dedicado a la lente principal, de 64 MP. El situado justo debajo alberga tanto una cámara gran angular de 8MP como una cámara macro de 2MP.



Las cámara selfi, de 32 MP, con resolución 4K y equipada con un sensor de Sony IMX 615 con funciones de Inteligencia Artificial (IA), ofrece imágenes nítidas, aunque el Modo Retrato no acaba dibuja claramente los límites y en ocasiones muestra parte del pelo borroso, como si se tratara de un elemento que forma parte del fondo.



En cualquier caso, tanto la cámara delantera como la trasera logran un autoenfoque rápido y eficiente y rara vez precisan de una modificación manual de la exposición para hacer fotografías realistas, ni oscuras ni quemadas. Eso de día, porque de noche encuentra mayores dificultades para ofrecer el mismo nivel de detalle.



El procesador, por su parte, es MediaTek Dimensity 7050 de 6 nanómetros, alcanza un rendimiento fluido para actividades de uso diario y el modelo ofrece lo necesario para un terminal de estas características, que cuenta con 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento interno.



En definitiva, OPPO Reno 11F 5G es un móvil muy interesante para un uso diario, para consultar tanto redes sociales como aplicaciones de ofimática e, incluso, para jugar, aunque lógicamente no ofrece las prestaciones específicas en este último aspecto porque no es un dispositivo 'gaming'.



El dispositivo es único a nivel de diseño y eso lo ha planteado muy bien la compañía, al crear un módulo de cámaras que no sobresale tanto como para que el uso de una funda sea obligatorio, lo que permite ahorrarnos algo de dinero para equiparlo por completo.



Asimismo, el hecho de que su carga resista a temperaturas extremas es un dato que no pasará desapercibido para los amantes de la nieve, como tampoco lo hará para viajeros con destinos demasiado calurosos.





europapress