Discusión por aumento del IVA

En Ecuador la discusión de los sectores sociales, el Gobierno Nacional y la Asamblea Nacional, al momento se centra si se eleva el Impuesto al Valor Agregado (IVA) o no. Todo comenzó el 11 de enero de 2024, cuando el gobierno del presidente Noboa, envió a la Asamblea Nacional con el carácter de urgente, la “Ley Orgánica para enfrentar el Conflicto Armado Interno”, mediante la cual se propone modificar el artículo 65 del Régimen Tributario Interno, (RTI) que señala que, el IVA que actualmente es del 12% pasa al 15% partir de la aceptación del organismo legislativo y su promulgación en el Registro Oficial.

La discusión se origina debido a inconsistencia en el discurso del gobierno y sus representantes, pues al inicio el primer mandatario reconoció que al interior del país se habría desatado un conflicto o guerra interna, por lo cual era necesario y de suma urgencia sacar a los militares de los cuarteles y a la policía de sus destacamentos para enfrentar el conflicto armado con la delincuencia o grupos irregulares a quien se les denominó “terroristas”.

De esta manera el presidente de la república insistió en la necesidad de hacer un esfuerzo conjunto y con patriotismo en donde todos los ciudadanos pongan el hombro para liberar al Ecuador de los grupos delincuenciales que se han tomado las calles de algunas ciudades del país. Acto seguido mencionó la necesidad de recaudar de manera urgente recursos económicos frescos para financiar la movilización militar y policial, una vez que la caja fiscal enfrenta una gran crisis de liquidez.

Más adelante, el ministro de Economía y Finanzas Juan Carlos Vega, en un medio de comunicación nacional manifestó, que era de extrema urgencia que se incremente el IVA en tres puntos, es decir de 12 a 15%, para que el Ecuador pueda seguir gozando de créditos de los organismos crediticios internacionales como el Fondo Monetario Internacional.

De igual manera se ha manifestado de forma pública tanto por el presidente de la República como de sus voceros, que se necesita la aprobación del IVA, ya que hay necesidad urgente de recursos económicos para cubrir los pagos de salarios a los trabajadores y empleados del aparato público, que incluyen a toda la burocracia del sector público, militares y policías.

Un poco para disimular la injerencia en el Ecuador del FMI, en una entrevista al primer mandatario en una cadena de televisión nacional se le consultó, ¿si qué pasaría si los organismos internacionales que son una opción de financiamiento, pero ellos le van a pedir que presente pruebas de haber cumplido con la parte de la tarea que le toca y que va a mostrar? él contestó, de que no pasa nada ya que “hemos cumplido, hemos pagado la deuda externa a tiempo y otro punto importante es la aprobación del IVA, con lo cual aumentaremos la recaudación”.

La ciudadanía está consciente que una guerra cuesta y estaba dispuesta ha hacer sacrificios, pero frente a las inconsistencias gubernamental ahora tiene serios reparos, pues se sostiene que más allá de las urgencias de recursos económicos para la guerra, lo que efectivamente está detrás de la elevación del IVA, es el FMI, que ha insistido desde la época del presidente Lenin Moreno y Guillermo Lasso que se suba el IVA y se elimine los subsidios a los combustibles, incluido el gas de uso doméstico. Por tanto, se sostiene que el paquetazo de medidas tendría lugar con guerra o sin ella.

Se busca sin duda elevar en tres puntos el IVA y eliminar definitivamente los subsidios a los combustibles para con ello el país pueda liberar recursos económicos para cumplir de manera eficiente con el pago de la deuda externa, con los intereses de los bonos soberanos a los tenedores nacionales internacionales y con ello continuar recibiendo más créditos de los organismos crediticios.

Al parecer, tal como lo ha manifestado el presidente, más allá de cubrir los salarios de los empleados del sector público, así como a profesores, médicos, policías, militares, a los gobiernos provinciales, cantonales y parroquiales, al seguro social, a los prestadores de servicios al Estado, su prioridad y la de su ministro de Economía y Finanzas es pagar a tiempo la deuda externa y que los ecuatorianos simplemente esperen hasta que haya recursos económicos en la caja fiscal.

La Asamblea Nacional tiene 30 días para aprobar la ley o negarla y saber si se sube o no el IVA, es decir hasta el 11 de febrero de 2024, hasta el momento todo es incierto, en el entorno legislativo se escuchan voces a favor y en contra, por su parte las bancadas de la Revolución Ciudadana y Social Cristiano, aparentemente se oponen a la ley y plantean que en vez de castigar a los más vulnerables con más impuestos se cree un impuesto a los bancos, que se cobre un impuesto por volumen de crédito de los bancos, anticipo de recursos a los grandes contribuyentes, que se cree un impuesto especial temporal, entre otros.

Loss sectores sociales y populares, como los trabajadores organizados en las centrales sindicales anuncian grandes paralizaciones y la población indígena representada por la CONAIE, anuncian movilizaciones, aunque el gobierno lo ha sentenciado, él que se oponga a las medidas se encontrarán en las calles con los militares, una vez que Ecuador está oficialmente en estado de guerra. Los manifestantes podrían ser acusados de terroristas.

En los corrillos de la Asamblea Nacional, negociaciones van y negociaciones vienen, el gobierno ha manifestado que el texto de la ley podría ser cambiado, y tendría una propuesta de un IVA diferenciado, que implicaría subir un punto, es decir al 13% de manera permanente y los dos puntos que elevarían al 15% serían temporales. Como van las cosas, al parecer lo que se está buscando es quemar el tiempo y que pasen los 30 días para que el proyecto pase como lo determina la Constitución “por el ministerio de la ley”.

Félix S. Pilay Toala

Profesor Universitario

Doctor. Economista, Magister en Administración Pública.

Presidente, RED ICALC, (Red de Investigadores Científicos de América Latina y el Caribe)

Pilayfelix071@gmail.com