Cracks que democratizaron los mercados
Cada año, en estas fechas tan especiales, recordamos y hacemos un recuento de lo bueno y lo malo, aciertos y fracasos. Pero, también surge la nostalgia al recordar a aquellos seres queridos y personas con quienes tuvimos el gusto de compartir, conocer y reconocer lo mucho que aportaron desde sus talentos a nuestro país.
Para quienes trabajamos de cerca con emprendedores, innovadores y empresas familiares, cerrando el 2023 y abierto ya el 2024, recordamos la partida de varios de ellos, sus éxitos, y cómo, gracias a su legado, esa labor sigue dando frutos a través de sus empresas y renace cada año.
Mauricio Russo, co fundador de Casa Ideas, nos dejó grandes lecciones de cómo hacer viable un modelo de venta de productos para el hogar, de buen diseño y factura, a un buen precio y con éxito de ventas. Mauricio supo hacer crecer su negocio, pero a la vez pudo entrar y transformar nuestros hogares y oficinas. Sin duda, un valor de marca con un sello inconfundible que sigue firme en nuestro mercado y expandiéndose por Latinoamérica. Sin embargo, su legado más perdurable será su gesta por democratizar el diseño y la decoración, así como ampliar la posibilidad de disfrutar de un hogar alegre y acogedor, más allá de las limitaciones de recursos económicos.
Más reciente aún lo de Humberto Fischer, uno de los controladores de las mayores cadenas de casinos en Chile, Dreams, y reconocido por su calidad humana y sus ganas de enseñar a los más jóvenes. Un tema que le apasionaba y al que no le puso límites en su capacidad de compartir; característica que también compartía Russo.
La historia de Humberto se inicia como la de muchos profesionales que deciden emprender. Veterinario de profesión, junto a su hermano Claudio, formó un holding empresarial que incursionó con éxito en el negocio de los salmones. Con AquaChile, fue pionero en una industria que hoy es de gran relevancia en el sur del país y que, tras el cobre, es la segunda que más exporta. Desde ahí, diversificó su inversión, convirtiéndose en un empresario prolífico en los ámbitos agrícola, forestal, inmobiliario y del entretenimiento. Fue sin duda, junto a su familia, uno de los que generalizó la entretención, poniéndola al alcance de una emergente clase media.
Otro empresario del rubro pesquero que partió este 2023 es Jorge Fernández. A sus 85 años, su legado empresarial en la pesquera y salmonera Camanchaca es indudable.
Destacó siempre por su espíritu emprendedor, que lo llevó a la salmonicultura y, posteriormente, al cultivo de mejillones (miticultura). Un hombre recto, con visión empresarial anclada en la riqueza de nuestros recursos naturales y en las posibilidades de nuestra accidentada geografía, cuya compañía fue pionera en responder al apetito del sector financiero por incorporarse a esta nueva industria latinoamericana, abriendo la empresa a la bolsa en 2018. Quizás podríamos desprender que Fernández posibilitó el acceso de los trabajadores chilenos a convertirse en accionistas a través de sus AFPs y a beneficiarse de la emergencia de este nuevo polo de desarrollo económico.
También quisiera destacar al emprendedor linarense Roberto Movillo, quien con la creación de hoteles y hosterías y su participación en ferias y giras en el exterior, fue uno de los más destacados empresarios que invirtieron en toda la zona magallánica, desde Punta Arenas a Puerto Natales, llegando a Torres del Paine. Reconocido por lograr la renovación del Hotel Termas de Panimávida, después de décadas de declinación, salta a la vista su rol y su compromiso con recuperar y expandir la alicaída actividad turística en su tierra natal, recuperando y potenciando sus riquezas naturales y abriendo posibilidades de trabajo y esparcimiento a sus coterráneos.
En todos estos casos, nos quedamos con mucho más que solo el recuerdo de grandes personas, innovadores y líderes. Nos quedamos, también, con un enorme legado que permite que sus obras, hoy, sigan adelante en beneficio de sus familias, colaboradores y de la sociedad. Aunque, el hilo de oro que los reúne es más fino y significativo: todos ellos reconocieron que emprender es construir sobre la abundancia de medios, en vez de lamentarse de la escasez de recursos, y así, democratizaron a través de mercados de productos, servicios, experiencias y de capitales la vida de miles de chilenos anónimos, siendo la mano visible del espíritu emprendedor que mueve a las naciones y por ello son dignos de ser recordados y celebrados en este momento de balances y propósitos para el futuro.
Gonzalo Jiménez Seminario,
CEO Proteus Management, Governance & Effectuation
Profesor de ingeniería UC
