La Salud Mental: El Pilar Fundamental para la Sostenibilidad Laboral
En la vorágine del mundo laboral, a menudo olvidamos que los colaboradores no son meras piezas intercambiables en el engranaje de una empresa. Son seres humanos con necesidades físicas y emocionales, y entre estas últimas, destaca de manera crucial la salud mental, por lo que ignorar este aspecto puede resultar fatal para la continuidad y prosperidad de cualquier organización.
Los datos recopilados por Infojobs y Esade, en su estudio sobre el estado del mercado laboral en España, arrojan una luz inquietante sobre la situación. Durante el año 2022, el 27% de los trabajadores consideraron abandonar sus puestos de trabajo, un aumento del 4% con respecto al año anterior. ¿Cuál fue la razón principal? La protección de su salud mental, con un no menor 32%. Este porcentaje supera a motivos que, en otras circunstancias, podrían parecer más tangibles, como la búsqueda de mejores condiciones económicas (27%) o la posibilidad de una mayor conciliación laboral (24%).
Estos datos son reveladores y- a mi juicio- exigen una reflexión profunda por parte de los líderes empresariales.
La salud mental no es un lujo, sino un derecho fundamental. Proporcionar entornos laborales que promuevan el bienestar psicológico no solo es ético, sino que también es una estrategia inteligente de gestión empresarial. Un colaborador sano mentalmente es más productivo, creativo y comprometido con su trabajo. Además, reduce el riesgo de ausentismo y de alta rotación, lo que a la larga representa un ahorro significativo para la empresa.
Por ello, fomentar la salud mental en el lugar de trabajo implica implementar políticas que promuevan la prevención, la detección temprana y el apoyo a quienes lo necesiten. Esto va más allá de ofrecer un simple día de descanso o una sala de relajación, sino que implica crear una cultura organizacional que valore y respete el bienestar emocional de sus colaboradores.
En este sentido, es imperioso que las empresas inviertan en programas de apoyo psicológico y capacitación en manejo del estrés, promoviendo una cultura de apertura y empatía y dejando atrás el estigma asociado a los problemas de salud mental.
Claro está que la salud mental de los colaboradores no puede ser un tema secundario en la agenda empresarial y, actualmente, es un pilar fundamental para la sostenibilidad laboral a largo plazo, por lo que ignorar esta realidad es arriesgar la continuidad y el éxito de cualquier organización.
La invitación es clara: no se puede descuidar este punto si se quiere conservar y potenciar el capital humano. Por ello, la inversión en la salud mental de los colaboradores es, sin duda, la mejor garantía para un futuro laboral sostenible.
Jorge Fuentes,
Psicólogo y Director de Pranavida
