Reformas al sistema de pensiones jubilares

Ecuador, la Comisión interdisciplinaria para la elaboración de un proyecto de reformas al sistema de pensiones, fue constituida por el presidente Guillermo Lasso y liderada por Augusto de la Torres, después de varios meses de actividad han mencionado que entregarán al presidente Lasso, tres propuestas de cambio en el sistema de pensiones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.

La comisión entro en funcionamiento el 10 de enero de 2023, está compuesta por ocho ciudadanos ecuatorianos, entre ellos los conocidos economistas neoliberales, Pablo Lucio Paredes y Augusto de la Torre, quienes tenían la responsabilidad de realizar cambios al servicio de pensiones que brinda en la actualidad el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, y con ello, encontrar mecanismos que restablezcan la credibilidad y eficiencia de la prestación social.

Es importante destacar que la seguridad social del Ecuador, desde 1963, forma parte de la Caja Nacional del Seguro Social y posteriormente en 1970, por efecto de un Decreto Supremo número 9, este organismo se constituye en el actual Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y es una entidad pública, autónoma con patrimonio y personería jurídica y su función es prestar el beneficio social a su población asegurada.

A lo largo de los años, esta entidad de servicio social, ha servido de caja chica a los gobiernos de turno, quienes han utilizado sus recursos, para cubrir parte del déficit fiscal o a su vez para destinarlo a la corrupción, al robo y al saqueo. Miles de millones de dólares han sido tomado de sus arcas y casi nunca han sido devuelto, lo cual cae en un delito, ya que como se sabe, este dinero no es público sino de los afiliados y debe retornar a ellos mediante las prestaciones.

Al mismo tiempo, muchos gobiernos a lo largo de los años han tenido la intención de desaparecerlo, se han realizado consultas y plebiscitos para que el pueblo se pronuncie si se debe privatizar o no el seguro social, pero la ciudadanía y el conjunto de los trabajadores y afiliados lo han defendido a capa y espada, tanto que aún se lo conserva. Sin embargo, el saqueo de sus recursos económicos del que ha sido víctima, hoy esta noble entidad de solidaridad se encuentra atravesando por una profunda crisis económica.

Para solventar esta situación fue que el gobierno nacional, conformó la comisión que dirige Augusto de la Torre, al momento se asegura que se habría terminado su labor y se tendría como resultado, tres propuestas que se las entregarán al presidente de la República y según se ha indicado, estas reformas serían clave para que el sistema de pensiones de la entidad pueda disminuir su déficit.

La propuesta uno, “aumento gradual en el número de años para determinar la pensión”, al momento la pensión jubilar se la calcula en base a los cinco mejores años de remuneración, la reforma plantea que ya no sean los 5 mejores años sino el promedio de 20 a 25 años y que cada año se aumente un año hasta llegar al máximo que sería 25.

La dos, “reajuste gradual en la edad mínima y los años de aporte para jubilarse”, es decir que en vez de que una persona con aporte de 30 años y 60 años de vida pueda jubilarse, la comisión de “expertos” plantea que deberá tener 60 años de vida y 35 de aportaciones y si tiene 70 años ya no podrá jubilarse con 10 años como lo es ahora sino con 15 años.

La reforma tres, plantea que se debe “modificar la tabla para calcular la pensión, dependiendo de la edad del retiro y el tiempo que recibirá el beneficio”. A todas luces se aprecia que las reformas que se presentan son parches y en nada resuelven el problema y más bien lo agudizan.

Se ha manifestado que la propuesta luego de entregársela al presidente, será socializada con la sociedad civil y los sectores políticos, para luego presentar el anteproyecto de ley. Las reacciones de los sectores sociales no se han hecho esperar, es evidente que lo que se ha hecho es aumenta el tiempo para para que una persona afiliada pueda jubilarse y se reducen las pensiones que recibirán por su tiempo de aportación.

Preocupa que se pretenda resolver el problema castigando a los sectores vulnerables que son quienes han trabajado toda su vida y aspiran jubilarse a los sesenta años y poder gozar de alguna manera de la pensión jubilar, además no se habla en absoluto de recuperar el dinero robado, como siempre el peso recae sobre los desprotegidos. Que Dios ilumine las mentes de los involucrados y este proyecto no pase, de lo contrario, sería un golpe brutal al estómago de los ciudadanos que aspiran en el futuro jubilarse.

Prof. Félix S. Pilay Toala

Doctor. Economista, Magister en Administración Pública.

Presidente de la Red de Investigadores Científicos de América Latina y el Caribe

RED ICALC

Pilayfelix071@gmail.com