INFLAVID
COVID es una pandemia que puede haber sido producto un humano (se sospechó de los chinos), pero también puede haber sido causado por un desequilibrio de la naturaleza. En cambio, la inflación es un producto netamente humano y cuando se generaliza a casi todo el mundo se transforma también en una pandemia, con la diferencia que se trasmite no por contactos corporal, sino que por incompetencia, ineficiencia o ignorancia de las autoridades monetarias.
¿Increíble que todas esas autoridades hayan pisado el palito al mismo tiempo? Más aun, considerando que quienes son responsable por el sistema financiero no son aprendices ni aficionados, sino que profesionales, muchos de ellos exhibiendo orgullosos diplomas de PhD.
Paul Samuelson, autor de un famoso libro elemental de economía, señalaba que une ligera inflación no es algo pernicioso, por ejemplo, 1 o 2 % anual, y sostenía que sus efectos podrían ser benéfico porque era como aceitar la máquina para que funcione en forma rápida y eficiente. El problema real es que a los responsables siempre se le pasa la mano y de pequeña inflacioncita suelen pasar a una gran hiperinflación. Lo sufrió la China en el pasado, Alemania después de la I guerra mundial, Brasil y Argentina hace algunas décadas, lo está sufriendo Venezuela. En Chile ha sido recurrente desde fines del siglo XIX hasta el presente.
Es siempre un azote autoinfligido por el hombre. Una especie de psicopatía monetaria generada por autoridades supuestamente cuerdas pero ineptas.
La inflación mundial según el FMI llegará a 7.4 % este año. Algunos pocos, como Japón (2,1 %) y China (2,5%) se han mantenido en forma estable, pero una abrumadora mayoría de países están sufriendo sus efectos como se muestra en el cuadro (adjunto).
En la Unión Europea y zona del Euro se situará entre 8.6% y 9.6 %. Francia, 6.5 % es la menos afectada, Rusia 17 % y Lituania 20.5 % las más sufrida. En Usa ya va en 9.1 %. La mayoría está en el rango 8 a 10 %. Los casos extremos son hiperinflación como Venezuela 500 %, Sudan 244 % y Argentina 60 %
¿Qué es lo que está sucediendo?
La teoría económica explica que es un fenómeno monetario. Esto es, que el Banco Central emite una cantidad de dinero superior a la que la economía demanda bajo condiciones de estabilidad. Eso lo saben todos los banqueros del mundo como también las autoridades internacionales, el FMI, Banco Mundial, ONU ¿Por qué insisten?.
No hay ignorancia, sino que indisciplina de las autoridades monetarias, aun cuando en no pocos países son independientes del poder ejecutivo. Algunos se defienden argumentando que es importada de otros países, que los consumidores se disparan en sus gastos, otros más intelectuales señalan que es un problema estructural ¿?
Se culpa a la guerra Rusia/Ucrania, al alza de la energía en particular el petróleo y el gas, al precio de los alimentos, al sistema cambiario y como está de moda, también culpan al Covid y el calentamiento global… pero no son los causantes, sino que son los canales por las que la inflación se manifiesta cuando las autoridades monetarias no cumplen con sus responsabilidades. Se quedan dormidos o ceden a presiones políticas.
Algunos buscan causas exógenas, fuera de su alcance, como el precio de los combustibles, los alimentos, y otros, pero son argumentos no aceptables porque confunden el sistema de precios relativos con el nivel absoluto de los mismo. Confunden el precio de las lechugas con el IPC.
El precio del petróleo se ha duplicado en el año y el precio del gas se ha disparado en 600 %. Usa tenía en operaciones 790 pozos gas o petróleo y ahora solo 251 (31 %). En parte son los efectos de la descarbonización en la generación de energía. Pero es cambiar un mal por otro. Se usa menos carbón y más petróleo y gas que son igualmente contaminantes.
Con todo, el petróleo, gas y carbón con tres bienes entre los miles que se generan en la economía. Por importante que sean, no explican por sí solo esa situación. Si la población estuviera gastando más en energía sucias, tendría que gastar menos en otros bienes cuando el sistema económico está funcionado a un ritmo relativamente normal. El PIB mundial crecerá este año en 3 %. El sistema financiero, el dinero, no debería estar creciendo en proporciones desenfrenadas. Pero la inflación indica que ha habido un mal manejo.
Javier Fuenzalida A.
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