Investigadores y emprendedores subrayan la importancia de acelerar la llegada de la medicina personalizada al paciente

|

Investigadores y emprendedores subrayan la importancia de acelerar la llegada de la medicina personalizada al paciente

Investigadores y emprendedores han subrayado la importancia de acelerar la llegada de innovaciones en medicina personalizada desde los laboratorios hasta los pacientes, durante la Jornada 'Del laboratorio al paciente: el complejo camino de los biomarcadores hasta el sistema sanitario', organizado por la Red de Enfermedades Inflamatorias (RICORS-REI) en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid, con motivo de su IV Asamblea Anual.



Los expertos se han centrado en los biomarcadores, cuya investigación es "fundamental" para avanzar hacia un modelo centrado precisamente en la Medicina Personalizada y de Precisión y tener un "impacto real" en las personas.



El coordinador de la RICORS-REI, el doctor Luis Rodríguez Rodríguez, ha reivindicado la creación de "modelos de retorno" que posibiliten que el conocimiento adquirido en los ensayos clínicos lleguen "más rápido" al sistema sanitario y a la sociedad.



Por su parte, la jefa del servicio de Inmunología del Hospital Universitario Ramón y Cajal, la doctora Luisa María Villar, ha recordado el recorrido del biomarcador sNfL, utilizado para evaluar daño axonal en esclerosis múltiple y que, a pesar de la "catarata de artículos" y de evidencia sobre su utilidad, las autoridades sanitarias les exigían bibliografía previa y guías clínicas.



"Dado el corto espacio de tiempo transcurrido desde el descubrimiento del biomarcador ¿cómo iba a haber guías clínicas?", ha resaltado Villar, quien ha detallado que llevarlo a la clínica en forma de test de diagnóstico 'in vitro' "no resultó ni fácil ni inmediato".



Todo ello se logró tras realizar un estudio multicéntrico y convencer a los gestores sanitarios de que su determinación podría suponer una mayor eficiencia en el uso de recursos sanitarios, al contribuir a tratamientos más personalizados; en la Comunidad de Madrid ya hay unos 3.000 pacientes monitorizados con este biomarcador, que fue incluido en su catálogo de pruebas en 2024.



La doctora Villar ha manifestado que entre los principales retos para incorporar los biomarcadores pasan por las autorizaciones autonómicas, la formación de profesionales y la nueva regulación europea de diagnósticos 'in vitro', que ha elevado las exigencias para obtener el marcado CE.



IMPULSAR LOS BIOMARCADORES DESDE LAS EMPRESAS


Por otro lado, el responsable de innovación del Instituto de Investigación Biomédica de A Coruña (INIBIC) y emprendedor ligado a empresas como Nasasbiotech, M-Trap o Nexotech, el doctor Alexandre de la Fuente, ha manifestado que la transferencia de biomarcadores también puede impulsarse desde las empresas, al considerar que son a menudo las que llevan estas herramientas hasta la práctica clínica.



"La forma en la que los investigadores son evaluados es incompatible con la transferencia", ha expresado De la Fuente, aseverando que los investigadores hacen "ciencia de más" y generan datos "sobre lo mismo" cuando podrían haberlo llevado ya al mercado.



Tras ello, ha explicado que el investigador se ve obligado a trabajar y publicar en ciclos cortos que evitan una proyección a largo plazo, y que fue su sensación de "científico frustrado" lo que le llevó a desviarse de una carrera académica convencional hacia el emprendimiento, buscando el impacto directo en productos reales.



El emprendedor ha defendido así un modelo de codesarrollo en el que clínicos, investigadores, empresas y pacientes se sienten juntos desde el inicio para definir el producto final y "evitar desarrollos brillantes en el laboratorio pero inviables en la práctica".



Uno de los principales "cuellos de botella" en innovación tienen que ver con transformar una idea científicamente sólida en un producto que cumpla requisitos regulatorios, de financiación y de mercado, pues se trata de una fase que exige validaciones, estudios de coste-efectividad, propiedad industrial bien planificada y procesos de fabricación escalables.



"Superar esa brecha es crucial si queremos que la innovación que generamos realmente llegue a los pacientes", ha remarcado De la Fuente.



De forma parecida se ha pronunciado el emprendedor Mario Grande, quien ha manifestado que el hecho de que una idea sea buena "no significa" que se sepa transferirla, venderla o que tenga prioridad para quien puede desarrollarla fuera del laboratorio.



"Es necesario un equipo multidisciplinar con especialistas en ciencia, economía, aspectos regulatorios... el investigador no es el responsable de todo ni tiene que ser siempre el protagonista", ha agregado.



Grande no cree que los obstáculos a la transferencia tengan que ver con que haya poco dinero para inversión ni con que falten buenas ideas, sino que falta capacidad de transmisión de esas ideas desde la investigación a la empresa.



Por su parte, el abogado experto en propiedad intelectual e industrial en la Oficina de Transferencia del Conocimiento (OTC) del Instituto de Investigación del Hospital Clínico San Carlos (IdISSC)Santiago Cuenco ha afirmado que esta institución se encuentra generando invenciones que generan interés en la industria, como la patente europea que identifica firmas de genes asociadas a la respuesta a tratamientos de inmunoterapia, o el método 'in vitro' para detectar ciertos tipos de cáncer desarrollado junto a una empresa especializada.




europapress